El Grupo Construya informó ayer que las ventas al sector privado de insumos para la industria de la construcción cayeron en octubre un 17,3% en términos interanuales. Según la entidad, en la comparación con septiembre de este año, las ventas también registraron una merma, del 9,93% desestacionalizado.
El índice que mide la evolución de los volúmenes vendidos al sector privado, acumuló entre enero y octubre de 2018, una baja de 1,6% con relación al mismo período de 2017, hay que destacar que la variable no registraba valores negativos desde marzo del 2017.
Las malas cifras del índice Construya se suman a las del Indec que informaron este martes a través del indicador sintético (ISAC) que en septiembre se registró una baja de 4,2 % respecto a igual mes del año anterior, registrando la peor caída en más de un año y medio. A su vez, según el Indec el índice de la serie desestacionalizada arroja una variación negativa de 0,8% respecto al mes anterior y el índice serie tendencia-ciclo registró una baja de 0,6% respecto al mes anterior. La construcción es uno de los sectores más golpeados por la crisis, ambas mediciones dan cuenta de una tendencia del sector que es probable que finalice el año con un resultado negativo.
Distintos analistas comenzaron a advertir en los últimos días que, la conjunción de la recesión económica junto con un alto nivel de endeudamiento, podían ser la antesala de que el país podría se encuentre a un paso de caer en una cesación de pagos. La receta es la de siempre ajuste salvaje y más endeudamiento para garantizar el pago de la deuda a los especuladores. Sin embargo, las y los trabajadores tenemos otra salida.
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