El Gobierno de Estados Unidos acusó a la compañía tecnológica china Huawei de cometer fraude bancario al violar presuntamente las sanciones a Irán y del robo de secretos comerciales a T-Mobile, y confirmó su petición de extradición de una de sus ejecutivas.
En una demanda penal presentada ante un tribunal de Brooklyn, en Nueva York, el Departamento de Justicia acusó a Huawei, dos compañías afiliadas y a su directora financiera, Meng Wanzhou, de trece cargos de fraude y conspiración para saltarse las sanciones a Irán.
Huawei negó hoy haber cometido ninguno de los delitos de los que la acusó en una demanda penal el Departamento de Justicia de EE.UU. "La compañía niega que ella, su subsidiaria o filial hayan cometido cualquiera de las infracciones de la ley de EEUU expuestas en cada una de las acusaciones", indicó Huawei a través de un comunicado de prensa difundido a los medios.
"En cuanto a la acusación de robo de secretos comerciales interpuesta por el Distrito Occidental de Washington, ya fueron objeto de una demanda civil que fue resuelta por las partes después de que un jurado de Seattle no encontrara daños ni conducta intencionada ni maliciosa", afirma la empresa.
Por su parte, el gobierno chino reclamó hoy a Estados Unidos que "acabe con su injustificada represión a empresas chinas, incluida Huawei, y las trate de manera objetiva y justa". En un comunicado publicado en la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, uno de sus voceros, Geng Shuang, aseguró que "China está muy preocupada por la demanda penal presentada por el Departamento de Justicia de EEUU contra Huawei y su directora financiera, Meng Wanzhou".
“Hay fuertes tentativas y manipulaciones políticas detrás de esto”, afirmó Geng. “Exigimos con firmeza a Estados Unidos que termine con su injustificada represión a las empresas chinas, incluida Huawei, y las trate de manera objetiva y justa". "China defenderá con determinación los derechos e intereses legítimos de las empresas chinas", sentencia el documento.
Huawei Technologies Co., el mayor fabricante de smarthphones de China, ha sido objeto de una amplia investigación por parte de las autoridades estadounidenses, que en diciembre pasado pidieron a la Justicia de Canadá la detención de Meng Wanzhou.
Washington confirmó que está buscando la extradición de la ejecutiva, que permanece en libertad bajo fianza en el país vecino, y cuyo caso ha generado una fuerte tensión entre Estados Unidos, China y Canadá. Según las autoridades estadounidenses, Huawei y sus filiales, con plena participación de sus ejecutivos, actuaron de forma "fraudulenta", cometiendo toda una serie de delitos como fraude bancario, violación de sanciones, blanqueo de dinero y obstrucción de la Justicia.
"Durante más de una década, Huawei usó una estrategia de mentira y engaño para manejar y hacer crecer su negocio", señaló en un comunicado el fiscal del distrito de Brooklyn (Nueva York), Richard P. Donoghue.
Asimismo, Huawei, que se mostró "decepcionada al conocer los cargos presentados contra la compañía" por EE.UU.- aseguró no tener ninguna constancia sobre los delitos de los que Washington acusa también a la directora financiera de la empresa, Meng Wanzhou, detenida el pasado 1 de diciembre en Canadá a petición estadounidense.
En un intento de bajarle el tono a las denuncias, el secretario del Tesoro norteamericano, Steven Mnuchin, aseguró este martes que espera "significativos progresos" en las negociaciones con China esta semana, a la vez que precisó que las acusaciones contra el gigante tecnológico chino Huawei de fraude bancario están "separadas" de la disputa comercial. "Los temas fundamentales de los que hemos hablado son: acceso al mercado, asegurar que no se obliga a establecer empresas conjuntas, que no hay transferencia forzada de tecnología y tener un mecanismo una vez alcanzado un acuerdo que podemos vigilar y hacer cumplir", indicó Mnuchin en una entrevista con la cadena Fox Business. "Espero que logremos significativos progresos esta semana en esos asuntos", remarcó.
Mnuchin marcó distancias con el anuncio del Departamento de Justicia de presentar cargos formales contra Huawei por cometer fraude bancario a través de la violación de las sanciones a Irán y del robo de secretos comerciales a un rival de este país. "Ese tema no es parte de las discusiones comerciales (...) cualquier cuestión que tiene relación con la violación de las leyes de EE.UU. o las sanciones de EE.UU. van por un camino separado", afirmó.
El gigante chino llevaba tiempo en el punto de mira del Gobierno de EE.UU., que en la práctica ha prohibido a la compañía que instale sus equipos de telecomunicación en importantes redes estadounidenses ante el temor de que podrían utilizarse para espiar.
Las acusaciones llegan en medio de una crisis entre Washington y Pekín, agravada tras la detención en diciembre de Meng en Canadá. La controversia ha continuado en los últimos días, cuando el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, reemplazó al embajador de Canadá en China, John McCallum, después de que el diplomático había dado a entender que Meng tiene muchas posibilidades de evitar su extradición Estados Unidos.
La guerra comercial desatada por Trump tiene uno de sus pilares estratégicos en desactivar el proyecto chino llamado “Made in China 2025”. El objetivo de Xi Jinping es competir en ramas industriales de alta tecnología a mediados de la próxima década, modificando el patrón económico de plataforma de exportación de productos con bajo valor agregado para ser competidora en los grandes nichos de inversión de capital y exportación de productos con alto valor agregado, lo que despierta la reacción de Estado Unidos. |