Estamos ante un año electoral marcado por un fuerte ataque a los trabajadores y el pueblo: inflación, tarifazos, aumento del boleto, etc. La avanzada de Cambiemos y el FMI viene acompañada de represión.
Desde la Corriente Nacional 9 de Abril/ Lista Bordó, como parte del Secretariado del SUTE recuperado y del PTS-FIT, venimos planteando la necesidad de enfrentar decididamente las políticas de ajuste, con organización, movilizándonos masivamente en un bloque independiente de los partidos del ajuste, y recuperando el paro como herramienta de lucha.
Se viene una agenda de movilizaciones, que arrancaron el 2 de enero contra el MendoTRAN. Distintos sectores de la burocracia sindical y el PJ preparan el escenario electoral con desfiles, pero sin plantear seriamente una lucha para enfrentar el ajuste del gobierno nacional, los gobiernos provinciales y el FMI.
Desde la Multisectorial 21F, que agrupa a sectores peronistas, impusieron una marcha contra los tarifazos para este jueves 14/03, queriendo repetir el escenario del 7 de Febrero. Nosotros/as opinamos que hay que copar las calles, y para eso hay que preparar las acciones, discutir en el marco de unidad, pero exigiendo claramente a las centrales sindicales un paro nacional y plan de lucha. Pero, para esta multisectorial, eso no es tema de discusión.
La burocracia sindical está mucho más preocupada por sus especulaciones electorales con el kirchnerismo y las variantes del peronismo que por los padecimientos del pueblo trabajador.
A los ataques al bolsillo se suman despidos, cierres y suspensiones ante los que la CGT mira expectante. Ni siquiera fueron capaces de garantizar y convocar seriamente al 8M, porque haber garantizado un verdadero paro activo, en el marco de 72 hs de huelga docente, ponía en discusión la paz social e imponía por la fuerza la necesidad de un plan de lucha para enfrentar el ajuste de Macri y los gobernadores oficialistas y opositores.
Pero eso no está en los planes de ninguna dirección sindical burocrática: ni la Ctera, ni las CGT, ni las CTA. Ahora convocan a una marcha el 4 de abril (que aún no ha sido suspendida) como si faltasen motivos para parar el país YA. Ellos están muy cerca de los partidos que siempre gobernaron para los empresarios y muy lejos del ejemplo de los chalecos amarillos en Francia que ponen en jaque al gobierno de Macron, o de las mujeres que en todo el mundo copan las calles por sus derechos.
Las internas del peronismo y realineamientos en pos de la unidad “antiMacri” influencian el mapa interno del SUTE.
El PJ sumó en su último Congreso al dirigente de la Lista Celeste Maure, que hasta ahora venía marginado por el peronismo local. Por su parte el PTP-PCR / Lista Verde, ya integra formalmente el frente “Elegí” con el PJ, lo que los ubica formalmente en un bloque político con las listas de la vieja burocracia o alguna de ellas.
Aunque la división entre la Lista Azul-Naranja (hasta ahora apoyados por La Cámpora), y la Lista Celeste (que apoya la política de Carmona y los intendentes), todavía no se resuelve, la dinámica hacia la unidad del peronismo puede cerrar esa guerra interna que ambos han mantenido hasta ahora, y abrir nuevos problemas al interior de nuestro sindicato.
Todos cierran los ojos y firman la "unidad" contra Macri con el “mal menor”. Así, se juntan desde pro mineros como Gioja, pro-yankees como Massa, #AntiTodosLosDerechos como Urtubey hasta Felipe Sola, responsable de los crímenes de Maxi y Dario o Miguel Pichetto, uno de los más conocidos abanderados de la xenofobia. Personeros que apoyan la injerencia imperialista en Venezuela y le dieron gobernabilidad a Macri durante estos 4 años votando todas las leyes esenciales contra el pueblo trabajador, como la reforma previsional de diciembre de 2017.
Todos candidatos y políticos que tratan a las maestras de vagas, que trabajamos poco, que tenemos muchos derechos.
Si pueden taparse la nariz ante estos “pre candidatos”, ¿quién puede asegurar que no los unirá el espanto en las internas sindicales?
Ante esto, La Agrupación Marrón del SUTE nos propone un bloque “novedoso” para enfrentar estas maniobras de aparato: El Frente de Unidad de Estatales. Una unidad aún por arriba, de algunos referentes de cada uno de la mayoría de los espacios en que está dividida políticamente la interna del SUTE.
Nosotros/as opinamos distinto. Creemos que hay que fortalecer la izquierda en el SUTE. Hay que fortalecernos desde el programa del FURS, el que fue construido en un debate intenso, votado en plenario, adoptado por todas sus corrientes y donde hay una expresión clara por la independencia de clase y de máxima observancia por la democracia sindical, el respeto por las mayorías y minorías, y el desarrollo del debate de ideas y propuestas. Hay que unificar la fuerza del sindicato, sin abandonar las diferencias y la lucha de tendencias en el interior, apelando a la unidad de acción para enfrentar los ataques y posibilitar a los/as trabajadores/as pegar con más fuerza, hacer una experiencia, fortalecerse.
Esto no se logra por arreglos ni por acuerdos, sino poniendo en movimientos los y las cientas de activistas que han despertado a la militancia con el nuevo SUTE y sin los/as cuales es imposible aspirar a construir una conducción con fuerte base en las escuelas. Con la fuerza imparable de las mujeres, que somos el 80% del gremio adelante.
Hay que superar los zigzag de algunos/as dirigentes, donde la falta de perspectiva clara de hacia dónde quieren conducir el sindicato genera antipatía y desconfianza en algunos sectores de la base.
Hay que fortalecer la democracia sindical y transparentar al máximo todo lo que hace a la vida del sindicato, desde sus propuestas hasta sus gastos. Fomentar presupuestos participativos y públicos, y garantizar que los afiliados puedan votar en plenario meses antes en qué se invertirá. Generalizar el ingreso por concurso de cualquier empleado o contratado del sindicato, como hemos hecho en Acción Social para los cargos en campings, o como hicimos para la contratación de las cantinas, donde realizamos una licitación con convocatoria pública a través del diario, entre otras tareas.
Tenemos que pelear por desterrar esa extorsión llamada Item Aula, poner de pie el gremio y recuperar el paro como herramienta de lucha. Hay que enfrentar los descuentos, organizando las escuelas, fortaleciendo a los delegados. Habilitando la posibilidad de disponer del 5% de las cuotas sindicales en los departamentos que tengan favorable el mandato de fondo de huelga, con el objetivo de realizar diversas actividades, centralizadas o por escuela, a partir de las cuales recaudar lo necesario para contrarrestar los descuentos.
Necesitamos desarrollar al máximo esa aspiración de construir un sindicato participativo, democrático, con perspectiva de género, independiente del Estado, de los gobiernos y los políticos patronales. La propuesta es consolidar un sindicato que organice las escuelas en defensa de la Educación Pública, profundizando la campaña #MásParaEducación, poniendo como eje central la lucha por más presupuesto nacional y provincial, rechazando el acuerdo con el FMI y los organismos de crédito internacional y el pago de la deuda externa. |