La Junta Interna de ATE y el cuerpo de delegados de Desarrollo Social, llevando adelante el mandato de asamblea denunció judicialmente que, con la colocación de molinetes y vallado fijo en la sede central, dicho organismo se transformó en un “edificio Cromañón”, poniendo en riesgo a trabajadores y población que concurre a solicitar ayuda social. El dispositivo impide la evacuación del personal en caso de emergencia y generó importantes jornadas de lucha.
En el día de hoy se conoció la sentencia favorable al reclamo.
El juez Terrier dictó sentencia donde resuelve ordenar “con carácter de medida cautelar, a las autoridades del Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia de Buenos Aires, abstenerse de poner en funcionamiento y/o suspender, según el caso, el sistema de molinetes con acceso biométrico y vallado de vidrio, en las entradas al edificio Sede Central de calle 55 entre 6 y 7 de La Plata”
Lorena Timko, secretaria general de la Junta Interna ATE señaló que “esta medida es un paso importante para todos los trabajadores donde además todos los pedidos de informe que solicitamos deja al descubierto las condiciones deplorables de trabajo que tenemos. Los trabajadores sufrimos todos los días la falta de calefacción en invierno y refrigeración en verano, la energía eléctrica colapsa y no podemos enchufar un caloventor cuando tenemos una computadora prendida”, señaló la delegada.
La puesta en valor del edificio realizada en 2018 significó un cambio de fachada, dejando sin resolver los problemas de fondo, se instalaron molinetes para controlar el ingreso y egreso del personal (incluido uno con acceso a las cocheras), barandas fijas amuradas al piso, rejas, mirador policial, que convirtieron al edificio en una trampa mortal para los trabajadores y público en general ante cualquier situación de emergencia o accidente. Las distintas inspecciones que se realizaron muestran los problemas estructurales que tiene el organismo, de funcionamiento, de mobiliario y la precaria instalación eléctrica.
“Se gastaron millones en cambio de fachada y molinetes mientras no tenemos ni calefacción ni refrigeración”, manifestó Timko.
El ministerio no cumple con la legislación vigente en lo referido a la salud laboral: matafuegos vencidos, escalera de emergencia inexistente, una única puerta de ingreso y egreso. Sistema eléctrico deficitario y cableado “colgando” en las oficinas.
Toda esta situación fue ratificada por los informes de la Dirección de Bomberos (cuartel La Plata), el Ministerio de Trabajo y la Superintendencia de Riesgos del Trabajo, que realizaron inspecciones a solicitud de la Junta Interna de ATE.
La medida judicial se presentó, al igual que en IOMA, con el patrocinio de los abogados del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH) Luz Santos Morón y Sebastián Maidan.
“La medida cautelar recientemente dictada pone en primer plano la necesidad de cumplir con la normativa de Seguridad e Higiene como parte de los derechos de los trabajadores, de trabajar precisamente en condiciones dignas, donde se obliga al Ministerio de Desarrollo Social a que no implemente el vallado y los molinetes en la sede central hasta tanto no se den las condiciones de seguridad necesarias para garantizar la integridad física del conjunto de los trabajadores y las personas que asisten al ministerio”, declaró la abogada.
Y agregó “creo que este fallo junto con el que conseguimos en IOMA pone un límite al accionar del gobierno de la provincia que pretende controlar a los trabajadores sin tener en cuenta las condiciones de trabajo y los riesgos que genera el incumplimiento de las normas de seguridad e higiene.”
Este es un primer paso en la lucha que llevan los trabajadores del Ministerio de Desarrollo Social y los otros ministerios de la Provincia, para garantizar las condiciones de trabajo. | 
