Festejo y desahogo, Flor Bonsegundo consigue el gol del empate.
Analizamos la hazaña de las pibas: el empate ante Escocia que mantiene viva la esperanza de un milagro para clasificar a octavos, en el mejor Mundial en la historia de las futbolistas argentinas.
A falta de 15 minutos para el final, la selección de Escocia goleaba por 3 a 0 a las chicas argentinas. Pero esos minutos fueron suficientes para lograr una remontada histórica y empatar el partido en 3. Ahora podemos soñar con la clasificación a octavos de final, luego de 2 mundiales donde solo se conoció la derrota.
El entrenador Carlos Borrello cambió el sistema táctico con respecto a lo que fueron los dos partidos previos, donde se enfrentaban a dos grandes potencias (Japón e Inglaterra) y donde el empate en la previa era muy bien visto. Se pudo lograr con Japón, y no así con las inglesas, donde las chicas cayeron derrotadas por la mínima diferencia.
Pero había que cambiar, éste era el partido a ganar, a sumar sí o sí. Se paró el equipo con un 4-4-2, con Banini acompañando más a Sole Jaimes, y con Bonsegundo y Larroquette por los costados. Y funcionaba, porque Argentina manejaba la pelota y creaba situaciones claras, algo que no había hecho en todo el Mundial.
Todo cambió luego del primer cuarto de hora, cuando a los 16 minutos, Larroquette tuvo un cabezazo clarísimo que estrelló el travesaño y Jaimes no pudo concretar en el rebote. Sin embargo eso fue un preludio de los goles escoceses: a los 19’, en su primera llegada, Little adelantaba a las europeas tras capturar un rebote de Correa.
El partido fue igual hasta el entretiempo: Argentina manejaba la pelota, pero Escocia atacaba muy fácil y vertical, sin toques en mitad de cancha y aprovechando los errores argentinos, ya que cuentan con jugadoras mucho más veloces.
El segundo tiempo empezó distinto, con la figura argentina, Estefanía Banini, tirada muy atrás y jugando casi en la mitad de la cancha. Encima a los 3 minutos ya estiraba la diferencia Escocia, gracias al cabezazo de Beattie.
Recién avanzaba en el campo a los 10 minutos Argentina, gracias a corajeadas de Banini, pero el golpe del segundo gol era anímicamente muy fuerte; sumado al cansancio de las titulares, el panorama era muy oscuro.
A los 60 minutos, el técnico decide sacar a Banini para el ingreso de la delantera de punta Mili Menéndez, algo que parecía raro y arriesgado.
El partido era chato y sin ocasiones para ninguno, con Escocia tranquila con el resultado. Y parecía que lo liquidaba a los 70 minutos gracias al rebote capturado por Chuthbert tras un córner, con el que ponía el 3-0 que parecía definitivo.
Pero todo cambió y la remontada histórica empezó con el ingreso de la jovencísima Dalila Ippolito, jugadora de River de tan solo 17 años que fue clave desde su ingreso.
Ella es Dalila Ippólito, autora del primer gol de Argentina frente a Escocia y quien cambió el partido para la Selección Nacional. Tiene 17 años, juega en River y tiene que hacer la tarea en sus tiempos libres para cumplir con la escuela #VamosLasPibas#VamosArgentinapic.twitter.com/5lmhI0ywxq
Dalila, que solía jugar en los potreros de Villa Lugano, encaró en la primera que tuvo en el Palacio de los Príncipes de París y habilitó a Milagros Menéndez que definió muy bien poniendo el 1-3 a 16 minutos del final. Y 5 minutos más tarde, de una jugada poco elaborada, Florencia Bonsegundo sacó un remate fortísimo que se metió en el arco escocés, poniendo a la argentina a tiro del empate a 10 del final.
Las chicas demostraban en todo momento valentía y mucho orgullo, ya que la mayoría de las jugadoras escocesas son profesionales, cobran un sueldo por ello, juegan en la mejor liga del mundo, no así la mayoría de las nuestras.
Argentina ya buscaba el ataque muy directo, con Ippolito y Menéndez, además del ingreso de Mayorga en la mitad de la cancha. Y así llegó el empate, una pelota al área, un rebote recogido por Aldana Cometti, que fue derribada en el área. El VAR salvó a la Selección, ya que la árbitra norcoreana no había cobrado en primera instancia y luego rectificó, pero el suspenso seguía. Un capítulo más tenía que haber, el remate de Bonsegundo fue atajado por la arquera escocesa, y un minuto después se revisó la acción. Volvió a patear Florencia y, esta vez sí, la 11 definió fuerte y aseguró el empate agónico. Fue a los 90’, el partido terminó. Es histórico: la Argentina suma 2 puntos en un Mundial y convierte 3 goles en15 minutos, luego de convertir 1 en 8 partidos.
Ahora las chicas se aseguraron el tercer puesto en el grupo D y tienen que esperar que los partidos de mañana sábado entre Tailandia y Chile (a las 13:00 hs), y entre Camerún y Nueva Zelanda (16:00 hs) terminen - ambos dos- en empate para lograr la clasificación a 8vos.
Sin embargo, pase lo que pase, ya es el mejor resultado para la Selección Argentina. Y es un hecho histórico que reivindica la lucha de la mujer, la lucha feminista, tanto en el fútbol como en la cultura general argentina.
Orgullo se siente al ver a las jugadoras argentinas.
