El Gobierno frenó los tarifazos este año para moderar la inflación de cara a las elecciones, pero sólo fue un parche, los aumentos fueron brutales en los últimos años. Los ajustes tarifarios no significaron mejoras en la calidad de los servicios mientras que las ganancias de las empresas crecieron.
"Asustan los porcentajes cuando decís cuánto van a subir. Pero una factura que se pagaba $ 150 y pasa a $ 350 son (una diferencia de) $ 200, que es también (igual a) dos taxis o dos pizzas”, esa fue la declaración del entonces ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, quien defendía los primeros tarifazos de Cambiemos a fines de 2015.
Lejos de dos pizzas, las tarifas de los servicios públicos crecieron exponencialmente en los últimos tres años y hubo aumentos superiores al 2.000 %. La calidad del servicio sigue siendo deficiente, en verano millones de familias quedan sin luz por los reiterados cortes. El día del padre hubo un apagón histórico donde el Gobierno señaló a la empresa Transener como responsable.
Las empresas privadas que gestionan los servicios públicos, herencia de la privatización menemista y que se mantuvo vigente durante el kirchnerismo, aumentaron sus ganancias en la era Macri.
Ante la inflación sin frenos y las próximas elecciones el Gobierno decidió congelar los aumentos de las tarifas hasta fin de año, pero es una medida insuficiente cuando miles de familias se endeudan para pagar los servicios o se tuvieron que dar de baja.
En el último trimestre de 2018, la empresa Moni que otorga préstamos personales registró una suba del 45 % en la cantidad de préstamos solicitados para pagar servicios en comparación con el mismo período del año anterior. El monto promedio que solicitaron fue de $ 2.750 a una tasa nominal anual (TNA) del 65 % y una comisión por uso de la plataforma, que ronda los $ 500.
La empresa relevó más de 31.000 transacciones y comunicó que el mayor aumento del pago en cuotas se dio en las facturas de gas (55 %); después, los servicios de agua (49 %) y finalmente, los de energía eléctrica (39 %).
Año a año las tarifas no pararon de aumentar, mientras que los salarios no siguieron el mismo camino, para los trabajadores registrados sólo subieron 119 % desde diciembre de 2015 a diciembre de 2018, según datos de Indec.
Ajustes de las tarifas de los servicios públicos:
Gas
Según el Observatorio de Tarifas de la Energía (UMET), la tarifa de Metrogas en la Ciudad de Buenos Aires para un usuario residencial de poco consumo (categorías R1, 0-500 m3/año) desde 2015 a mayo de este año subió 2.102,3 %.
Para un hogar residencial de consumo medio (categoría R3.1, 1001-1251 m3/año) en el mismo período el incremento fue de 1.297 %.
Electricidad
Las facturas de luz de Edenor saltaron un 2.831 % desde 2015 a mayo de este año al considerar un consumo residencial pequeño (R1, consumo 0-150 kWh) en la Ciudad de Buenos Aires, según el mismo estudio.
Para el caso de un usuario con consumo mediano (R5, consumo 451-500 kWh) el incremento de la factura fue del 3.555 % en el mismo período.
Transporte público
Viajar en tren, colectivo y subte para ir a trabajar o estudiar también es más costoso. El pasaje mínimo de colectivo en 2015 salía $ 3 y este año cuesta $ 18. Un incremento de 500 %.
Los pasajes de tren varían según los ramales y los tramos. Para los ramales Mitre, Sarmiento y San Martín el trayecto mínimo costaba en 2015 $ 2 y en la actualidad sale $ 12,3. Un alza de 513 %. En el mismo período los boletos de los ramales Roca y Belgrano Sur saltaron de $ 1 a $ 7,8 (675 % más), el Belgrano Norte aumentó 575 %, y el Urquiza 700 %.
El subte costaba en 2015 $ 4,50 y este año se ubica en $ 19. Un salto del 322 %.
No hay crisis para las empresas energéticas
Los aumentos de las tarifas significaron más ganancias para las empresas que gestionan los servicios públicos. Las utilidades de las grandes empresas gasíferas y eléctricas se consolidaron en 2017 y, en 2018. Un informe del Instituto IPYPP Pensamiento y Políticas Públicas mostró que hubo “una recomposición de las utilidades que en algunos casos, como las eléctricas, transportistas y algunas gasíferas fueron imbatibles si se las compara con compañías de otros rubros”.
En base a los balances de las respectivas empresas, Edenor registró una suba en sus ingresos por servicios (ventas) del orden del 1.118 %, mientras que Edesur obtuvo una mejora de 821 % si se compara 2018 contra 2015. En tanto, el alza de sus resultados operativos (ganancias por ventas menos costos de producción), fue del 223 % para Edenor y 215 % para Edesur.
La empresa encargada del transporte de energía eléctrica Transener, obtuvo un incremento en sus ingresos por servicios de 290 %, y en sus resultados operativos del orden de 1.250 % (multiplicó sus ganancias por 13,5), según IPYPP. Se trata de la compañía que pertenece a Pampa Energía de Marcelo Mindlin, amigo de Macri.
En el segmento de generación, Pampa Energía tuvo un aumento en sus ingresos de 554 %, y en los de Central Puerto, del 206 %. A su vez, la suba de los resultados operativos fue de 836 % para Pampa Energía y de 1.230 % para Central Puerto, agregó el informe.
El documento registró que las cuatro principales empresas gasíferas en la Argentina triplicaron sus ganancias en 2017 en relación a 2015. Si se analizan los primeros seis meses de 2018 duplican lo que ganaron en 2015.
Las distribuidoras de gas natural, tuvieron en conjunto ganancias por $ 642 millones en 2016, que se multiplicaron 24 veces en 2017 (+2.300 %) por efecto de los tarifazos. El informe sostiene que “entre esas empresas, particularmente notable es la situación de Gas Cuyana y Distribuidora de Gas del Centro, que han reportado las mayores ganancias, con números que superan 400 %; en ellas, Nicolás Caputo es uno de los principales inversores”. Un íntimo amigo del presidente.
Las ganancias de las diez principales productoras y distribuidoras de gas en Argentina, en 2017, fueron de $ 37.000 millones, se multiplicaron por cuatro con respecto a 2015. IPYPP advirtió que “los resultados de 2018 son aún más alarmantes, ya que sólo en el primer semestre, acumularon mayores ganancias que en todo 2015”.
Anulación de los tarifazos
Los servicios públicos son un derecho esencial para el pueblo trabajador. No pueden quedar en manos de empresas que sólo buscan mejorar sus ganancias. El kirchnerismo mantuvo el esquema privatizador del menemismo y subsidió a las empresas. El macrismo dolarizó las tarifas y avaló subas siderales.
Sólo el Frente de Izquierda Unidad propone una alternativa. Es urgente la anulación de los tarifazos. En la actualidad operan distintas empresas privadas en cada tramo del sistema energético. Por eso para establecer una planificación racional es necesaria la estatización sin pago del sistema energético nacional, es decir de todas las etapas productivas: desde la extracción de los recursos, la generación, el transporte hasta la distribución a los usuarios bajo control, administración y gestión de trabajadores y control de los usuarios populares.
Subir al tren, al subte o al colectivo en horas picos es una odisea, no se puede seguir viajando así. Hay que reestatizar todo el sistema ferroviario y del subte (transporte y carga) bajo control, administración y gestión de los trabajadores de todos los niveles y control de los usuarios populares.
La perspectiva es que los trabajadores y los sectores populares puedan acceder a tarifas bajas, en camino hacia el abaratamiento de los costos en base al desarrollo productivo.