En su visita a Tigre, Axel Kicillof expresó que "venimos a proponer futuro y un camino de trabajo, empleo, producción y salud. Vamos a devolver la tranquilidad a la gente, para que sepa cuánto le van a salir las cosas y que si trabaja le va a rendir, que pueda ir a las escuelas, a los hospitales porque va a haber insumos y vacunas; y que los trabajadores y empresarios cuenten con instrumentos para trabajar."
Buenísima la propuesta, lástima que de “futuro” tiene poco. Más bien tiene olor a naftalina. El barrio de Las Tunas es uno de los tantos olvidados, y recordados fugazmente en época de campaña. Estos personajes que hoy pisan las calles que caminamos todos los días, se codean más seguido con los amigos de Massa y Zamora, los que viven en Nordelta o en el barrio privado Santa Teresa, donde vive el actual Intendente tigrense, que con las familias que forman parte del pueblo trabajador.
Ellos se llenan la boca hablando de lo que nos hace falta a los pobres, pero viven en un mundo muy distinto al que vivimos la mayoría, y cuando por fin llegan al poder, priorizan pagar las deudas fraudulentas, como hicieron en el pasado cuando les pagaron a los fondos buitres y hoy ya adelantaron que en caso de que ganen las próximas elecciones van pagarle al FMI.
Entonces, ¿de dónde va a salir la plata para salud, educación, trabajo e infraestructura, si toda la plata se la va a llevar el FMI?
El actual gobierno de Macri, no sólo que no dió solución a ninguno de los problemas
cotidianos de los vecinos de Tigre, sino que los agravó. Las Tunas se sigue inundando como en la década kirchnerista, y en las anteriores. Pasan los gobiernos, pero lluvia tras lluvia el agua sigue entrando en las casas de los vecinos, sin que ninguno les dé solución.
Nada nuevo tienen ellos para ofrecernos, si siguen gobernando para una minoría.
Massa cuando estuvo a la cabeza del ANSES, apelaba los juicios de los jubilados que
intentaban cobrar una mísera jubilación. Mientras Cristina en 2012 comparaba los juicios de nuestros viejos con los fondos buitres.
A la juventud solo le ofrecieron las patrullas del COT para que los persigan por portación de rostro, y ni hablar de los “Pitufos” que inventó Scioli, el ex Gobernador Kirchnerista de la Pcia. de Buenos Aires.
Hoy después de las panquequeadas de Sergio Massa, están todos juntos, y nos quieren hacer creer que solo tenemos dos opciones, y no es verdad.
En el Frente de Izquierda - Unidad (FIT-U) tenemos nuestros propios candidatos, como candidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires a Christian Castillo, que es docente y da clases en la UBA, y como candidata a intendente en Tigre a Paula Akerfeld, una docente isleña.
De esta manera se diferenciaba de los partidos de los poderosos: "Volanteada, caminata, pegatina, recorridas por Talar, Benavidez, Retiro. Así arrancó la semana de una campaña a pulmón en la que caminamos los mismos barrios en los que vivimos; no cómo los que salen del country para hacer campaña pero que van a mantener todo cómo está y peor bajo las ordenes del FMI. Los únicos que queremos invertir las prioridades somos nosotros. Los únicos que no tenemos panqueques y somos todos laburantes, la única lista que podes votar sin taparte la nariz. ¡Vamos con el FIT Unidad y con Nico del Caño!" |
