Al igual que distintos ministros del gobierno nacional, y el mismo día en que asumieron los diputados electos en el Congreso, Guido Sandleris brindó una conferencia de prensa para exponer un balance de su gestión al frente del BCRA.
Sin embargo, lo que acaparó la atención de los medios y de los “mercados” fue la presentación pública de su renuncia anticipada, ya que aclaró entraría en vigencia a partir del 10 de diciembre.
El presidente del Central sostuvo que de esta forma se lograría "que el presidente electo cuente con absoluta libertad para designar a quienes crea adecuados para implementar su plan económico, incluyendo su política monetaria y cambiaria".
La jornada finalizó con una suba de 2,3 % en el dólar “contado con liqui” que cerró por encima de los $ 76, ensanchando la brecha con el oficial a 27,6 %. El ´dólar blue y el MEP siguieron la misma tendencia. Mientras el dólar minorista cerró a $ 62,92, unos 4 centavos por encima de la jornada previa.
Sandleris se va el cepo se queda
El actual presidente del Banco Central ocupa ese cargo desde septiembre de 2018, cuando tras la renegociación del Stand By con el FMI, rodó la cabeza de su antecesor: “Toto” Caputo.
Sandleris heredó una política de tasas por las nubes, ideadas por Federico Sturzenegger, antecesor de Caputo, en un intento por contener el tipo de cambio para bajar la inflación. Sturzenegger fue el creador de la bicicleta financiera, una oportunidad de negocios para los especuladores y la banca. Nunca cumplió las metas de inflación que el mismo impuso y dejó una bomba de Lebac, antecesoras de las Leliq
Sobre la gestión de Guido Sandleris que aplicó una política de regulación de la base monetaria, y zona cambiaria lo más recordado será la implementación del cepo cambiario y la fuga de capitales financiada por las reservas del Central.
Sólo en los primeros 10 meses de 2019, aún con cepo ya vigente desde mitad de septiembre, la fuga ascendió a u$d 26.865 millones. La cantidad de reservas netas que posee el Banco Central siguen siendo un misterio, sin confirmación oficial, se calcula que se ubican alrededor de u$d 12.000 millones.
Pero la medida más destacada, que ha logrado entre otros factores políticos, una cierta estabilidad del dólar –luego de la gran devaluación post PASO- fue el cepo cambiario. Primero en su versión más light, y tras las elecciones de octubre en su versión hard.
Esta medida de regulación cambiaria implementada por Sandleris será agradecida por la próxima gestión que es poco probable la levante en el corto plazo, pero no carga con el costo político de ser los aplicadores de la misma, que son muy impopulares para un amplio sector de pequeños ahorristas.
Sandleris se va el 10D, el cepo hard se queda.
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