A través de una carta al ministro Larraín Susana Tonda anunció su renuncia a la dirección del SENAME, cargo que ocupara desde el Marzo del 2018, a través de una carta. Allí, plantea que, “La principal razón que tuve para tomar esta decisión es que dados los acontecimientos de los últimos días, me ha quedado claro que no cuento con la confianza de mi jefatura directa, lo cual es imprescindible para ejercer un cargo como este”.
"Entiendo que es posible tener opiniones técnicas distintas, incluso cometer errores, pero dudar, o insinuar una duda pública por pequeña que sea, respecto a la intención de la búsqueda permanente del bien superior de los niños y niñas, sencillamente no me ha sido posible aceptar”. afirmaba Tonda.
La primera razón, y que termino de desatar la renuncia, fue el caso de los niños abusados en uno de los hogares del Sename en Hualpén, donde el ministro de justicia, jefe directo del Sename cuestiono la labor de la directora, con respecto a un asunto de tipo técnico, en si había que mover o no mover a los niños abusados de tal hogar.
Lo que parecía una nimiedad termino por romper las relaciones, las que ya venian quebradas por el asunto de ANI-SENAME, luego que se diera a conocer un convenio entre el Sename y la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) que facilitaba el acceso a información que posea el servicio para producir “contenido de inteligencia”.
Dicha medida recibió críticas por parte de organizaciones como la Defensoría de la Niñez, quienes acusaban una estigmatización hacia los niños residentes del Sename. La defensora de la Niñez, Patricia Muñoz manifestó a diversos medios que: “resulta preocupante ya que se produce en febrero tras estallido social y lo que hace es agudizar una evidente situación de estigmatización y criminalización que se pretende hacer de niños, niñas y adolescentes vinculados al Sename en los ámbitos en que se relacionan en cuanto a investigaciones criminales y eso nos parece insostenible, intolerable, máximo si esa información proviene del servicio que debería prestarles protección”.
Por su parte Hernán Larraín, ministro de justicia, desmarcándose de los supuestos conflictos internos que precipitaron la renuncia de Tonda, ha planteado a la prensa que “hemos tenido en algunas situaciones diferencias respecto de cosas puntuales y específicas, pero quiero reiterar que más allá de esas diferencias concretas que han existido hemos tenido siempre el mayor respaldo, apoyo y confianza en la gestión que ha realizado Susana Tonda".
Desde el ministerio del interior Blumel se posiciona en contra de la idea de dejar sin efecto el convenio SENAME-ANI, ya que bajo esta lógica el ministro de justicia Hernan Larrain pasaba a llevar 2 elementos clave, el primero a la directora del Sename, quien fuera quien firmó el acuerdo y en segundo lugar “se estaba poniendo en tela de juicio el rol que le corresponde a la ANI en un escenario en que uno de los objetivos del gobierno es potenciar a este organismo.”
Sin duda el gobierno se refiere a la situación abierta luego de la rebelión de octubre, de la cual al juventud fue protagonista e impulsora. El gobierno desde que asumió a venido trayendo una linea represora contra la juventud, ya sea promoviendo situaciones de precariedad laboral como lo intento hacer con el bullado estatuto laboral juvenil, o el ataque a las y los secundarios, como el proyecto Jaula Segura como con medidas de control “preventivo” de identidad o incluso con leyes criminalizadoras del graffiti como el reciente proyecto de ley “anti stickers”. |