El martes por la noche se confirmaron dos nuevos positivos en los Centros Socio Educativos de Régimen Cerrado “Agote” y “Belgrano”, según indicó en un comunicado la Junta Interna ATE del Consejo de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes. En el Agote una enfermera dio positivo y en el Belgrano un agente de seguridad. Junto a los casos del San Martín y el CAD ya suman 4 positivos, la realidad muestra que en los tres dispositivos porteños destinados a alojar menores, ya hay coronavirus. Fueron aislados debido al contacto con los positivos, unas 56 personas que cumplen diversas tareas en las instituciones.
En el pedido instan a que Ejecutivo porteño y organismos competentes aclaren cuál es la cantidad de adolescentes y trabajadores contagiados en los dispositivos, documentación sobre los protocolos de trabajo, admisión y actuación ante la sospecha de positivos.
Las diputadas señalan que “presentamos este pedido de informes de carácter urgente ante la grave situación de contagios por COVID-19 de adolescentes y trabajadores en los dispositivos juveniles de la Ciudad de Buenos Aires. A la fecha, en estos dispositivos los casos positivos son un joven de dieciséis años, dos enfermeras y un agente de seguridad. Otras cincuenta y seis personas que tuvieron contacto están aisladas, dentro de ellas dos adolescentes”.
La desidia y el desinterés del gobierno porteño se muestran también en cada intervención ante la pandemia, pero no es nuevo, es el derrotero de una serie de políticas que muestran el abandono e indiferencia de Larreta para con las necesidades de los sectores más vulnerables. En estos dispositivos que alojan a niñas, niños y adolescentes las condiciones en las que viven son preocupantes. Comparten dormitorios y distintos espacios, comedores y baños. Por lo cual deberían arbitrarse las medidas necesarias para contemplar protocolos específicos. Es por eso que las legisladoras del FITU también solicitaron que el ejecutivo porteño informe sobre la cantidad de jóvenes alojados, recursos edilicios (como cantidad de camas y espacios), higiénicos y recursos presupuestarios extraordinario para el adecuado funcionamiento durante la pandemia. Así también que se le exigió dotar a los trabajadores protocolos claros como así también los insumos y elementos de protección para las tareas que se realicen.
Este abandono e indiferencia de Larreta para con los sectores mas vulnerables se ve desde la negligencia ante la falta de agua, testeos, elementos de higiene y protocolos en los barrios vulnerados como en el Barrio Padre Mugica (villa 31) y en el Barrio Padre Ricciardelli (1-11-14) hasta las reiteradas denuncias del personal de salud porteño; y en otras dependencias del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat a cargo de María Migliore, como los paradores para adultos y adultos mayores.
Es preciso utilizar los inmuebles que tiene el propio GCBA, así también los hoteles que se pusieron a disposición de las personas que venían del extranjero, para poder articular todas las medidas necesarias para evitar los contagios en estos sectores que son los mas vulnerables. |