Epistolar es un podcast que se apropia de cartas de personajes muy variados, escritores, pintores, hasta cineastas y futbolistas. Leídas por actrices y actores, sus voces teatrales convocan al presente aquella correspondencia que casi ya no se practica, para dejarnos inmersos en historias a veces íntimas, otras más conocidas, pero que no podemos evitar escuchar hasta el final. Entrevistamos a Diego Jemio, el productor del programa. |
¿Cómo surgió la idea de podcast y cartas?
Como cualquier proyecto, Epistolar es hijo del deseo más genuino. En este caso, quise experimentar con el mundo de la palabra, del teatro y de la radio. El podcast sólo fue la condición de posibilidad para hacerlo. Con este formato, no tengo que pedirle permiso a nadie para realizar el proyecto ni reclamar un espacio en una radio. Luego, convoqué a Tomás Sprei, que viene del mundo del sonido y se encarga de que los episodios se oigan bien. Y que den una experiencia de “inmersión” en el universo de las cartas y de sus autores.
La selección de cartas es muy amplia, desde poetas, artistas, pintores a una antropóloga forense o un arquero de fútbol.
Las cartas van de Van Gogh al “Negro” Fontanarrosa. Y pasando por Rodolfo Walsh. Por ahora, la idea es no limitarnos a ciertos epistolarios o temáticas. Eso nos permite descubrir nuevos públicos y ser descubiertos por gente que quizás, de otra manera, no se hubiera acercado a Epistolar. El criterio de selección de las cartas también es arbitrario: tienen que gustarnos, tienen que ser bellas y tienen que, de alguna forma, decirnos algo sobre nuestra condición humana. Sí nos preocupamos porque sean cartas “redondas”; esto quiere decir que sean en sí mismo una unidad de sentido, que no pertenezcan a una serie, que puede dejar a gente afuera de la historia. Por ejemplo, grabamos una carta de Carlos Saura a Luis Buñuel sobre el paso del tiempo. Es un texto bello, que habla de un tema universal.
¿Reciben sugerencias, ideas? ¿Qué relación tienen con el oyente?
Pueden encontrarnos en Instagram en @epistolarpodcast. En Spotify la dirección es bit.ly/Epistolar. Con el proyecto pasó algo hermoso: un efecto contagio con los oyentes. Nos contactan, sugieren cartas y se ofrecen para leer. También tuvimos dos presentaciones en vivo, en las que llevamos esta idea a escena.
Alguna anécdota, sorpresa o hallazgo que haya surgido en esta experiencia artística.
Una carta de Manuel J. Castilla, el autor de “La pomeña”, que no conocía y me pareció bellísima y a la altura de las cartas de Rilke. U otra en verso de Violeta Parra, que nos acercó la actriz Paula Fernández Mbarak. Comenzamos grabando episodios de cartas célebres, pero luego fuimos acercando al público otras que son menos conocidas.
¿Es una experiencia artística? O hacen periodismo, investigación histórica, literatura perfomática...
No pensamos en nada de eso cuando comenzamos a hacer Epistolar. Y creo que eso es lo apasionante. Yo soy periodista y creo que esa curiosidad del oficio está puesta en la búsqueda de las cartas y en la introducción de cada episodio, que intento guionar cuidadosamente. Epistolar tiene algo de teatro leído, algo de radioteatro y, a su vez, son cartas reales de personas que existieron. En los últimos tiempos, nos llegaron varios mensajes de docentes que están usando Epistolar como herramienta pedagógica en secundarios y universidades. Son alcances inesperados y que nos ponen muy felices.
foto de Sandra Cartasso
Hacemos Epistolar
Diego Jemio, guión, selección de cartas y producción general.
Tomás Sprei, sonido y edición
El proyecto nació en diciembre de 2018.Subimos una carta cada semana (miércoles). IG @epistolarpodcast |
