Córdoba, Santa Fe, Tucumán y otras provincias no tienen transporte urbano. La UTA tuvo que convocar la medida por el malestar de las bases. Atrasos salariales y más precarización.
El malestar entre los trabajadores y trabajadoras del transporte viene desde hace meses. Los empresarios, pero también los gobiernos provinciales y municipales, aprovecharon la pandemia para lanzar una serie de ataques: falta de pago de salarios, suspensiones, precarización e incluso despidos.
Por eso ya vimos masivas movilizaciones en Rosario, paros en Córdoba y otras provincias. En el AMBA los servicios singuen funcionando, pero hay líneas donde crecen los casos de contagios por Covid-19.
Este miércoles, la crisis se profundizó. Una nueva rebelión de los autoconvocados en Córdoba le impuso al sindicato una asamblea y un paro que ya era un hecho.
Alli se adeuda desde marzo en horas extras y hay gente trabajando por fuera del convenio, entre otras cosas.
Por la tarde, la conducción del gremio tuvo que convocar un paro a nivel nacional. En un comunicado aseguró que "ha resuelto la inmediata retención de tareas hasta tanto se haga efectivo el deber salarial asumido". El malestar en las bases es muy fuerte. La medida se siente fuerte en Rosario, Mar del Plata, Mendoza, Tucumán, además de Córdoba.
La medida se da en el marco de una interna en la conducción del gremio, entre dos antiguos socios: Roberto Fernández y Miguel Bustunduy. Además, la UTA busca presionar a los gobiernos provinciales y la Nación para que normalice y aumento los subsidios a las empresas del interior. Como siempre, más cerca del patrón que del afiliado.