"Lo dispuesto carece de la debida fundamentación y vulnera los derechos, principios y garantías de la defensa en juicio, debido proceso, mínima intervención estatal, no injerencia indebida, intimidad, proporcionalidad, racionalidad, dignidad humana y porque compromete la seguridad nacional por las características desproporcionadas, exorbitantes y abusivas que presenta".
La sobrecarga de palabras y definiciones es parte de la presentación realizada por Mauricio Macri en la causa en la que es investigado por presuntas presiones sobre los empresarios dueños de C5N y del grupo Indalo.
La causa, a cargo de la jueza Servini busca establecer si existieron o no presiones por parte del ex presidente y su círculo más cercano sobre los empresarios Cristóbal López y Cristian de Sousa.
Las presiones, ocurridas durante 2016, habrían tenido como objetivo alinear al canal C5N con el oficialismo nacional en contra del kirchnerismo.
Como parte de la misma, Servini pidió ahora que se periten los celulares del ex presidente y de algunos de sus allegados para establecer si existieron llamadas relacionadas con la acusación.
El entrecruzamiento de llamados a peritar incluiría no solo a Macri sino también a los extitulares de la AFIP, Alberto Abad y Leandro Cuccioli, y otros imputados en la causa.
Los años macristas presenciaron un alineamiento casi total de la gran corporación mediática con el poder de turno. Dentro de ese esquema, resulta absolutamente lógico que hayan existido las presiones denunciadas.
Fueron también años de profundos ataques contra los trabajadores de prensa. En esos ataques -que incluyeron cierres, despidos, atraso en el pago de salarios- no hubo "grieta" entre los grandes medios. |