El gobierno porteño y Juntos por el cambio apuntan a la negación del problema, para lograr una mayor apertura de comercios, cediendo a las presiones de los comerciantes y empresarios en la Ciudad. Como sucedió el fin de semana con la apertura de los bares, sin protocolos ni distanciamiento social. Doce bares fueron clausurados por no cumplir los protocolos. La crisis sanitaria se combina con la crisis económica. No alcanza con medidas parciales. Para poder abrir, tienen que cumplirse los protocolos, tiene que haber una regulación, no una apertura indiscriminada como ocurrió. Se necesitan medidas complementarias para ayudar a los pequeños comerciantes como subsidios o la anulación de los tarifazos que no pueden pagar.
El ministro Quirós insiste en que se mantienen estables las curvas de contagios, pero lo que no dice, es que con esta meseta alta sostenida, lo que viene en aumento es la cantidad de fallecidos. Según los informes del Ministerio de salud de ciudad, el promedio semanal de fallecidos por día viene aumentando mostrando la saturación del sistema de salud.
El gobierno nacional ubica la responsabilidad individual sobre los ciudadanos, al mismo tiempo que cede frente a las presiones de los grupo económicos concentrados como Clarín. Ninguno, ni Nación ni Ciudad, tienen una política para pequeños comerciantes, empezando por anular las tarifas de servicios. Y con acceso a créditos para poder sostener los puestos de trabajo. Varios comercios ya tuvieron que cerrar como el tradicional restaurante Pippo.
Vamos a analizar la situación más de conjunto.
En Argentina el 8 de septiembre, llegamos al medio millón de contagios, de los cuales 105.498 son de residentes de ciudad, y 69.814 residen en otras aéreas pero se atienden acá, en total 175.312 positivos registrados en la ciudad.
Entre los barrios y zonas mas afectadas están los barrios populares de Flores, 1 – 11 -14, que registra 3937 casos confirmados de un total de 15744 entre todos los barrios populares, con 191 fallecidos.
Balvanera también lidera el ranking de contagios con 1.176 casos confirmados, un 39% del total de hisopados en el barrio.
El plan detectar viene siendo insuficiente.
Recién ahora Larreta anuncia que lo ampliarán a los contactos estrechos asintomáticos. Esto debería trasladarse también a los protocolos en las fábricas y lugares de trabajo, otro de los focos de contagio. En los supermercados los trabajadores vienen denunciando que los hacen ir a trabajar hasta con síntomas. En la multinacional Carrefour ya son 873 los trabajadores que dieron positivo según publica Jorge Duarte, periodista de InfoGremiales en su cuenta de Tweeter.
Hemos recibido desde que empezó la pandemia, decenas de denuncias de trabajadores a este diario.
El lunes se registro un récord de pasajeros en el Amba.
Fue el día de mayor circulación de pasajeros en el área metropolitana desde que empezó la cuarentena. En respuesta el gobierno porteño evalúa una restricción de circulación para los trabajadores no escenciales lo cual choca de lleno con la mayor apertura de negocios no esenciales.
La Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI) difundió una carta abierta a la sociedad en la que advirtió que "el sistema de salud está al borde del colapso".
Según el informe de los terapistas, ya no alcanza con ver el dato de camas disponibles, sino que se suma el cansancio y agotamiento de los trabajadores de la salud. En el Hospital Garraham, la Comisión de Higiene y Seguridad, conformada por sus trabajadores, realizó un relevamiento de las condiciones en las que trabajan. Cuentan que tienen las vacaciones suspendidas. En el caso de los franqueros trabajan jornadas de 14hs, dos días seguidos. Denuncian la falta de personal y exigen su pronta contratación, para brindar la atención necesaria a las familias y cuidar su salud.
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