El ministro de Seguridad, tras ser ratificado en su cargo, buscó congraciarse (otra vez) con lo más reaccionario de la sociedad atacando a los sectores que luchan por verdad y justicia.
En una entrevista realizada por la periodista Romina Manguel este domingo en el canal A24, el todavía ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires Sergio Berni dio algunas definiciones que deberían provocar el repudio generalizado de todos los organismos de derechos humanos, sean oficialistas o no.
Por un lado, el teniente coronel del Ejército y excarapintada negó haberse “apurado” al defender con uñas y dientes a la Policía Bonaerense por su actuación en el caso de la desaparición forzada seguida de muerte de Facundo Astudillo Castro. “La Justicia todavía no imputó a ningún efectivo”, se escudó el funcionario, como si eso solo pudiera borrar de un plumazo las sobradísimas pruebas que constan en la causa y que involucran a una banda de policías de Villarino y Bahía Blanca.
Más tarde, Berni decidió atacar a los organismos de derechos humanos, cuestionando el rechazo de algunos de ellos (sin nombrarlos) a integrarse a su gestión en el área de Asuntos Internos de la fuerza represiva provincial. Es decir, casi hacerse policías.
“Los funcionarios que trabajan en Derechos Humanos tienen los sueldos más altos y no aportan nada, son puro bla bla, no están acostumbrados a trabajar a las 7 de la mañana”, dijo Berni ante una Manguel sorprendida. Obviamente, como buen militar, su cobardía le impidió dar nombres precisos y cargos puntuales.
Pero eligió como foco de sus reflexiones al periodista Horacio Verbitsky, presidente del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) que lo había criticado duramente la semana pasada por su desempeño lamentable (o mejor dicho, propolicía) ante la protesta de la Bonaerense.
Verbitsky “tiene que aclarar muchas cosas, sobre pauta oficial, en algún momento lo vamos a aclarar”, dijo el ministro. Y aseguró (fiel a su estilo bravucón y tosco) que en la protesta en la quinta presidencial de Olivos hubo policías bonaerenses “bajo los efectos de la droga y el alcohol”.
La semana pasada Verbitsky había asegurado en varias entrevistas que dio que Berni “tiene un problema psicológico” y cuestionó la “frivolidad” del ministro al publicar spots proselitistas en medio de una crisis económica y social sin precedentes.
En respuesta, Berni dijo que a Verbitsky ni siquiera lo lee, “porque me aburre mucho. Hacer un planteo de ese sentido es faltarme el respeto. A mí no me importa, porque viene de un sector al que no pertenezco. Es faltarle el respeto al gobernador de la provincia de Buenos Aires”, dijo en referencia a Axel Kicillof, quien lo sostiene en el cargo pese a su responsabilidad evidente en bancar a una fuerza represiva que acumula muchos casos de gatillo fácil, muertes y hasta desapariciones forzadas en plena cuarentena.
Apuntando a Verbitsky, en verdad Berni pareciera reavivar su interna con la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, quien apenas asumida convocó a personas relacionadas al CELS para ocupar puestos en el Ministerio de Seguridad. Y lo hace a días de haber sido ratificado públicamente por su jefe Kicillof y más empoderado aún al recibir de la Gobernación más recursos, tecnología y "piropos" a la maldita Bonaerense.
Berni también afirmó en la entrevista que él nunca presentó su renuncia pero que Kicillof ni ningún otro funcionario del gobierno provincial tampoco nunca se la pidió. Se estima que tampoco lo hizo la vicepresidente Cristina Fernández, su jefa política.
"A muchos les molesta mi postura porque no me callo nada y porque soy leal. Les molesta la lealtad", dijo entre otras cosas Berni antes de terminar la entrevista en A24.
Berni califica de vagos a los Organismos de Derechos Humanos. Un simil del curro de los Derechos Humanos. Campaña para desprestigiar a quienen peleamos contra la brutalidad policial, las represiones dirigidas por él, la impunidad para los represores. Y sigue en su cargo..... pic.twitter.com/G9rNhbYc4C
Lo que pasa señor @SergioBerniArg no son sólo sus dichos, son también sus hechos, hijos de desaparecidos y referentes de Derechos Humanos sufrimos sus represiones en la panamericana por defender obreros de Lear que se habian quedado sin trabajo. https://t.co/SkZwj5hoqL
Es de esperar que los organismos de derechos humanos, sobre todo los que participan de la "interna" con Berni en la coalición gobernante (los que son independientes lo vienen haciendo desde el mismo día en que asumió), salgan a repudiar estos dichos de Berni. Dichos que no tienen nada que envidiarle a aquellos otros del expresidente Mauricio Macri, cuando en 2015, en plena campaña electoral, hablaba del "curro" de los derechos humanos.