En la marcha convocada en el centro porteño cientos de jóvenes trabajadores se hicieron presentes en apoyo a la toma de Guernica. Hablamos con algunos de ellos que nos comentaron sus preocupaciones y sus realidades.
Desde las 11 h de este jueves se desarrolló una gran convocatoria de sectores en lucha en el centro de la Ciudad de Buenos Aires. Comenzó con el Paro Internacional de trabajadores de reparto que vienen enfrentando el cierre de empresas como Glovo. A su vez confluyeron con las y los trabajadores de LATAM que pelean por sus puestos de trabajo. Por la tarde hubo un corte a las 15 h en Av. de Mayo y Av. 9 de julio donde se concentraron trabajadores precarizadxs que se sumaron a la convocatoria del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia para exigir Justicia por Facundo y apoyar a las más de dos mil familias que pelean por su derecho a la vivienda en Guernica.
“Estoy acá porque creo que todas las personas merecen vivir en una casa. Es un derecho básico y el Estado lo tiene que garantizar.” dice Tobías, trabajador informal de 22 años. Mientras, sostiene uno de los palos de la bandera de la Red de Trabajadorxs Precarizadxs que viene haciéndose presente en cada lucha. La toma de Guernica se convirtió en un conflicto nacional, siendo un caso testigo del accionar del gobierno. “Sé que el gobierno está intimando a los vecinos de Guernica y me parece mal. Creo que debería dar una verdadera solución.” agrega. Las extorsiones en el predio ya son conocidas y la amenaza de represión y desalojo sigue vigente.
Majo es bancaria y también se movilizó en solidaridad con las tomas y con los repartidores. Respecto al accionar del gobierno enfatiza en salir a la calle como método de lucha: “Creo que no nos está escuchando y se está manejando muy mal porque quieren desalojar a la gente y no les están dando respuestas, por eso salimos a apoyar.”
— La Red de Trabajadorxs Precarizadxs (@Redprecarizadxs) October 8, 2020
La necesidad de unir todos los reclamos
“Me parecía importante no dividir la lucha, unirla y elevar con fuerza todos nuestros reclamos”, declara un trabajador de MC Donald’s que prefirió reservar su identidad. “Yo creo que hay un doble discurso, yo soy trabajador precarizado de MC Donald’s y actualmente me están pagando el ATP, y creo que la relación que hay que hacer es la siguiente: el gobierno subvenciona a empresas millonarias como MC Donald’s, como Burger King y un montón de cadenas de comida rápida y hay un montón de personas que se quedaron afuera del IFE también, entonces como puede ser que los tipos banquen a empresas millonarias, mientras hay un montón de gente que no tiene para comer”.
Sergio tiene 26 años y trabaja en el sector gastronómico. Dice que “Lo primordial para ellos es que el terreno se desocupe para hacer countries y no dar un techo a las familias que están peleando por una vivienda digna”. Sergio, como parte del grueso de trabajadores que se vieron afectados por la crisis, siente el reclamo de las familias como propio ya que el costo de los alquileres muchas veces igualan los costos de los salarios y la vivienda para muchos jóvenes es un sueño negado.
Las más de dos mil familias que pelean por una vivienda para sus hijos, se preparan para evitar el desalojo que dictó la Justicia entre el 15 y 30 de octubre. Muchos se quedaron sin sustento por consecuencia de la crisis, pero tienen claro que es su derecho elemental y están dispuestos a pelear porque no tienen nada más para perder.
Una de las chicas de Guernica me contaba que la noche anterior al día que estaba pactado el desalojo no podían dormir porque a cada ruido pensaban que la policía estaba entrando al predio. Ahora la justicia dictó DOCE días en los que podrian desalojar, los están TORTURANDO.
Las calles son nuestras, redoblemos nuestra fuerza
“Tenemos que seguir reforzando la unidad, que por suerte se está generando y está aumentando cada día y queremos que ese compañerismo y esa solidaridad que existe hasta ahora se convierta en una unidad de todos los trabajadores, como lo venimos haciendo desde La Red, sabemos que si nos tocan a uno, tocan a todos” sostuvo Sergio en respuesta a la pregunta de cómo seguirán organizándose.
Si se mira la foto del escenario nacional por estos días tenemos por un lado el gobierno sentado con el Fondo Monetario Internacional negociando el pago de la deuda odiosa. Con todos los funcionarios organizando el acuerdo y la CGT postulando como wedding planner. El mismo gobierno del Frente de Todos que en su formato bonaerense hoy entra a los terrenos tomados en el suroeste del conurbano para extorsionar a miles de familias que lo único que piden es poder tener un pedazo de techo. Un gobierno que cada vez tiene más flancos débiles por la imposibilidad de conciliación de todas las posturas políticas que se encuentran dentro de esa coalición.
Del otro lado de la foto está la resistencia de jóvenes trabajadores que defienden el derecho a tener una vivienda digna y a trabajar con derechos. Que eligen no agachar más la cabeza y pelear de la forma que más conocen, abriendo los ojos y ganando las calles llamando a la más amplia solidaridad que está potenciando todas sus peleas.