En plena pandemia las puertas de la facultad se abrieron para que se hagan psicotécnicos para la policía. Mientras las autoridades no le dan opciones a egresados que no puede reclamar el título para poder trabajar, en plena crisis sanitaria y social.
El pasado Martes 6 de Octubre, estudiantes de la Facultad de Psicología de la UBA nos hicieron llegar un video en el que muestran a la policía haciendo fila para entrar al edificio de esa misma facultad, en la sede de Hipólito Irigoyen.
Cuando le preguntan la razón de por qué estaban haciendo esa fila para entrar al establecimiento, la persona dijo que era para acceder a un test psicotécnico (que comúnmente se utiliza en el ámbito laboral para determinar si la persona está en sus facultades psíquicas para el puesto que aplica) y afirman que ese trámite era para la policía.
Mientras que las autoridades de la UBA imponen una modalidad virtual, totalmente de manera inconsulta, que profundiza la precarización docentes, sobre la base de los miles que ya son ad honorem, también excluye a todas las y los estudiantes que no cuentan con las herramientas de conectividad necesarias para llevar adelante una cursada, siendo que la pandemia y la política económica del gobierno empujan a la deserción estudiantil, es esta misma juventud la que está expuesta a los trabajos más precarios, con los cuales cada vez se hace más difícil llegar a fin de mes, ni hablar de bancar una cursada online. Mientras tanto, las y los estudiantes que exigen entrar al sistema sanitario para dar recursos humanos frente a la pandemia, tienen el trámite paralizado en algunos casos desde diciembre del año pasado.
Queda claro al servicio de qué pone la facultad el Decano Biglieri.
Alertamos sobre este avance de la Universidad al servicio de la institución represiva del estado y no de las necesidades. Al servicio de la institución que secuestró docentes y estudiantes en la última dictadura militar, que es la responsable del gatillo fácil, que garantiza el narcotráfico y la trata de personas, y que es la misma fuerza policial que hostiga a las familias de Guernica que luchan por su legítimo derecho de una vivienda digna, y para quienes la respuesta por parte del estado es desalojarlas “pacíficamente” por esta misma institución.
Llamamos a todos los centros de estudiantes, agrupaciones estudiantiles, docentes y a toda la comunidad educativa a repudiar este hecho.