En medio de un clima de conflicto, la cupula de la Unión Tranviaria Automotor se reúne con las camaras del sector. Hay un paro de 48 horas suspendido. La miserable oferta empresaria.
Este martes a la conducción de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), encabezada por Roberto Fernández, se reunirá con las cámaras empresarias. Será la primera audiencia virtual en el marco de la conciliación obligatoria dispuesta la semana pasada por la cartera laboral.
La conducción de la UTA y el Gobierno intentan destrabar un conflicto salarial que ya lleva varios meses. El gremio obtuvo la semana pasada un compromiso de pago por partes de las cámaras patronales de $10.000, a cuenta de lo que se acuerde como futura escala salarial en el marco de la discusión paritaria.
Sin embargo, la oferta está lejos de conformar a los trabajadores del transporte. A pesar de que han seguido trabajando en medio de la pandemia, las empresas acumulan deudas salariales, pagan en cuotas y con atraso, y siguen echando nafta al fuego.
Es que los trabajadores ya vienen protagonizando conflictos desde mayo. A los paros en varias provincias (Cordoba, Santa Fe, Tucuman, La Rioja), se suman las protestas de autoconvocados en el Gran Buenos Aires.
En los últimos días hubo cortes en distintos accesos a la Ciudad de Buenos Aires.
Los choferes reclaman un aumento que permite recuperar el poder adquisitivo y que las empresas se pongan al día. Las empresas, con la complicidad de la cúpula sindical, reclaman más subsidios y siguen en una posición intransigente. En muchos casos se trata de grandes grupos que concentran la mayor parte de las líneas urbanas e interurbanas.