Publicada como sencillo a inicios de 1999, la canción y su video clip coparon los rankings y pantallas en todo el mundo, y lanzaron a la “princesa del pop” a lo alto del mundo de las celebridades.
Escrita por un letrista sueco llamado Max Martin, fue publicada como sencillo de Britney Spears en el primer trimestre de 1999, luego de ser lanzado inicialmente sin estar asociado a su nombre. En su primer día como albúm de la joven cantante, el single vendió 500.000 copias en Estados Unidos.
Al poco tiempo alcanzó el puesto número uno en el reconocido ranking estadounidense de la revista Billboard. Lo mismo ocurriría en casi todos los rankings musicales de la mayoría de los países occidentales. Fue la canción más exitosa de toda la carrera de la cantante y con ella fue nominada a la mejor interpretación vocal pop femenina en los premios Grammy de 2000.
Su video clip fuertemente promocionado por la cadena MTV, mostraba a una adolescente cansada de la rutina en la institución académica, que miraba el reloj esperando poder “liberarse” de sus obligaciones. La escena daba lugar luego a una coreografía con sus compañeras y compañeros en base a una canción de "desamor” y soledad.
Sin dudas, una canción pop que dejó su huella en el género y su ritmo en el recuerdo de millones de jóvenes y no tan jóvenes a lo largo del mundo. Hoy sigue sonando por las plataformas de streaming, donde suma más de 170 millones de reproducciones por Spotify.