La jornada comenzó con una merienda en la plazoleta enfrente de la entrada de La Boca, de la cual participaron familiares y amigos de Nehuén Rodríguez, así como también estuvieron presentes organizaciones políticas, sociales y madres de víctimas del gatillo fácil que acompañan a Roxana Cainzos, madre del joven.
Las madres presentes compartieron sus experiencias de lucha contra la violencia institucional, denunciaron el accionar de las fuerzas de seguridad y se solidarizaron con la lucha de la familia de Nehuén Rodríguez. Entre los presentes se encontraban Carolina Vila y su hijo Lucas Cabello quien quedó cuadripléjico tras ser baleado a quemarropa en noviembre de 2015 por el agente de la Policía Metropolitana Ricardo Ayala.
También se leyeron dos emotivas cartas que escribieron los hermanos de Nehuén. La jornada finalizó con la colocación de un tríptico en la entrada de La Boca, en la intersección de la Avenida Almirante Brown y Martin García. Es importante destacar que en el mismo lugar en 2018 un grupo de vecinos, organizaciones políticas y sociales del barrio habían colocado un chapón con la imagen de Nehuén, no solo en conmemoración del joven sino también para denunciar la violencia e impunidad con la que se maneja la policía. El chapón estaba junto a un mural de Diego Núñez, otro joven del barrio y también víctima del gatillo fácil por parte de un policía federal. Sin embargo, dos días antes del 24 de marzo de este año el chapón de Nehuén fue arrancado por desconocidos.
En relación a ese hecho, Roxana planteó que “este acto difícilmente podría leerse en términos que no fuera un amedrentamiento contra quienes nos organizamos y luchamos por estas causas y que además es referencia para tantas otras”. Luego agregó que “en un contexto en donde todavía persisten las políticas de persecución a nuestros jóvenes, las fuerzas se imponen con manejos turbios y nos dejan su mensaje marcando qué poder tienen. No casualmente esta reacción se enmarcó a días de la fecha donde recordamos y levantamos la bandera de los 30 mil desaparecidos, en continuidad a la lucha de las Madres de Plaza de Mayo y las madres contra el gatillo fácil. Supimos construir un camino de organización donde día a día generamos conciencia, oponiéndonos al sentido común impuesto, formando un espacio en el que luchamos por la memoria, por Nehuén, por todos los pibes y las pibas que nos arrebatan injustamente”.
Ante esta situación, lejos de quedarse de brazos cruzados decidieron en el día del cumpleaños de Nehuen recuperar un espacio de memoria en el barrio. Roxana finalizó el acto diciendo “decidimos seguir luchando contra la impunidad y el olvido por eso hoy colocamos nuevamente su imagen porque seguimos denunciando la violencia e impunidad policial ¡Nehuén presente, ahora y siempre!”. | 
