Además, las autoridades universitarias continúan la elección presencial a pesar del récord de contagios y la virtualidad, restringiendo la participación estudiantil en estas elecciones.
La junta electoral comunicó a los apoderados de la lista del Frente de Estudiantes de Izquierda que Somos Unsam y Construir Unsam, ambas listas referenciadas en el gobierno nacional, presentaron impugnaciones para que el FEI no pudiera estar en las elecciones de consejeros de la universidad. Parece difícil de creer, ya que la lista Somos UNSaM fue ampliamente repudiada por estudiantes de la escuela de sociales por haber truchado sus firmas para avalar su lista sin ser consultados. Sus propios compañeros de Ciencia y Tecnología los han denunciado por poner candidatos que jamás dieron su consentimiento para estar en esa lista.
Esto ocurre en unas elecciones sumamente antidemocráticas, convocadas de manera presencial como si la pandemia no existiera. Esto implica que la presentación de listas, la firma de avales, y las elecciones mismas sean presenciales, en el momento más dramático de la pandemia. Mientras tanto, todo el estudiantado está cursando de manera virtual, lo que garantiza unas elecciones sin participación de la comunidad educativa.
Esto fue decidido por el consejo superior en febrero, donde participan los actuales consejeros estudiantiles que forman las listas de Somos Unsam y Construir Unsam. Los actuales representantes de estas listas decidieron guardar el secreto por más de un mes, y luego seguir esta metodología totalmente alejada de garantizar elecciones con la participación del estudiantado.
El CECyT y el CEHum, por propuesta de la izquierda, continúan exigiendo la suspensión de estas elecciones para garantizar una elección donde pueda participar el estudiantado en el proceso de elección de sus representantes. Esto es indispensable porque es en el consejo donde se deciden los presupuestos de la universidad, su distribución, la apertura de nuevas comisiones, los cambios de planes de estudios, entre otras cosas.
Por otro lado, no es la primera vez que buscan silenciar a la izquierda en la Unsam, las elecciones de Consejo en el 2018 es un antecedente de intento de proscripción a la única lista independiente de la gestión universitaria.
El Frente de Estudiantes de Izquierda ya anunció la presentación de sus candidatos para lograr consejeros independientes de las autoridades universitarias y de todos los gobiernos. Este accionar antidemocrático no es casual, Somos Unsam, Construir Unsam y la Lista 1 expresan a las fuerzas políticas que a pesar de la pandemia mantienen a los trabajadores de la salud con salarios de miseria. Son las listas que forman parte de la casta de funcionarios que se reparten las vacunas entre los amigos mientras miles de adultos mayores mueren esperando su dosis.
La izquierda es la única lista que viene apoyando a los trabajadores de la salud en la lucha que están dando en todo el país, desde la clínica San Andres de Caseros hasta la heroica lucha en Neuquén, como de todos los trabajadores que pelean contra los despidos y la precarización.
En un contexto de casi un 50% de pobreza, es más necesario que nunca consejeros estudiantiles que denuncien el ajuste en el presupuesto de educación, exigiendo que se garantice la conectividad necesaria para todes les estudiantes así como la apertura de nuevas comisiones (para mejorar la cursada y evitar la sobrecarga docente) y la eliminación de todo cupo restrictivo.
