La nueva materia “Desarrollos Inmobiliarios” se incorpora al plan de estudios de la carrera Arquitectura. Es una materia que se dictaba en los posgrados de la FADU y ahora está disponible para cursar en la carrera, de manera optativa, a partir de este cuatrimestre de manera virtual, los viernes a la noche y los sábados a la mañana. El jefe de cátedra, Damián Tabakman, contó en La Nación que “la idea es dar a los alumnos conocimientos básicos sobre cómo armar un desarrollo inmobiliario”, en una nota donde se vanagloria el ingreso de estos contenidos a una facultad donde, y citamos a Tabakman, “en general hay prejuicio y reticencia para hablar de negocios”.
Sin embargo, se ve que hay mucho lugar para que entren a la facultad, por alfombra roja, empresarios del mundo de las finanzas y la especulación inmobiliaria.
Joel y Lucia, estudiantes de arquitectura y de la agrupación ContraImagen te cuentan quién es Damian Tabakman.
Tabakman pertenece a la Sociedad Argentina de Construcción y Desarrollo Estratégico (SACDE), liderada por Marcelo Midlin (ex ceo de Pampa Energía). Y en conjunto están desarrollando un mega proyecto en Av. Figuero Alcorta y La Pampa, que tiene varias excepciones al ya polémico Código Urbanístico de la CABA.
Todo esto no sorprende cuando las mismas autoridades de la facultad, ligadas al radicalismo y al pro, son quienes promueven tradicionalmente impulsar concursos para diseñar los emprendimientos en las tierras privatizadas, como fue el caso de los terrenos de Costa Salguero, que tanto debate generó el año pasado, y es parte de la avanzada gentrificadora que inició con la creación de la Agencia de Bienes S.E., una inmobiliaria estatal impulsada por el PRO y votada en la legislatura tanto por el oficialismo como la “oposición” del Frente de Todos.
En la Provincia de Buenos Aires se trata de countrys y canchas de golf. El año pasado vimos claramente como la prioridad no era defender a los que menos tienen: el desalojo de las familias de Guernica contrastó con el discurso del Gobierno, tanto de Alberto como Kiciloff, y ni hablar de Berni dando manija en todos los medios. Al mismo tiempo que en este medio denunciamos que los palos y topadoras para las familias que no tienen un lugar para vivir eran para construir barrios privados de lujo y canchas de golf. Para el negociado inmobiliario no hay grieta.
Esto no da respuesta a realmente pensar cuáles son las necesidades populares. En un momento donde hay más de 250.000 viviendas ociosas y más de 350.000 personas viviendo en villas y asentamientos en la Ciudad de Buenos Aires. Cuya situación es aún más crítica en pandemia.
La universidad pública y los profesionales que salimos de ella, podemos jugar otro rol en la sociedad y dar respuesta a las necesidades populares.
Con todas estas cuestiones estructurales relacionadas a la arquitectura y el urbanismo, nos parece fundamental abrir el debate en la facultad entre estudiantes y docentes sobre la orientación de nuestra carrera. |