A casi tres meses del comienzo de las revueltas en Colombia, el pueblo anuncia nuevas movilizaciones a propósito del día de la “independencia” nacional. De acuerdo a las declaraciones hechas a los medios, como el diario el País “El ministro de Defensa, Diego Molano, anunció que el 20 de julio no se realizará el tradicional desfile militar que se lleva a cabo en todo el país en conmemoración a la Independencia de Colombia.”
Como lo declara el ministro se resguardará el Congreso y se “acompañarán” las marchas pacíficas. A su vez, en declaraciones hechas por twitter el ministro Molano advirtió de capturas, judicializaciones y recompensas, y demás prohibiciones del régimen de Duque, llamando a los ciudadanos a denunciar al otro en una estrategia de pueblo contra pueblo. Esto se traduce en una fuerte presencia de la policía, el ESMAD y el Ejército, pues desde ya se anuncio que “reforzarán los esquemas de seguridad en la capital del país con 6.196 policías, 2.784 integrantes del Ejército Nacional y otros 592 en los municipios de la Sabana Norte” de acuerdo con lo publicado en Portafolio.
En consonancia con el gobierno de Duque, la alcaldesa de Bogotá Claudia López anunció en su cuenta de twitter que no va a tolerar actos de violencia “vamos a garantizar la tranquilidad en nuestra ciudad y a mitigar, contener y judicializar cualquier intento de infiltración violenta o vandálica a la movilización pacífica”. Asimismo, López ha dado la orden de decomisar los escudos, cascos, máscaras y demás implementos que protegen las primeras líneas, y Molano ofrece recompensas para quienes denuncien el paradero de sus integrantes.
Se sabe que está convocada en Bogotá una reunión de estas agrupaciones, de acuerdo con “las autoridades señalan que cerca de 300 personas, integrantes de otras ‘primeras líneas’, estarían arribando a la ciudad para participar en una marcha denominada ‘Marcial’ con cascos y escudos. A este grupo se sumaría la minga indígena que viene desde Santa Marta” afirma Portafolio en su emisión del 18 de julio.
También se sabe de la interceptación de las caravanas que desde varias ciudades se dirigen a Cali al encuentro de la Asamblea Nacional Popular que se lleva a cabo desde el 19 julio. Los autobuses han sido detenidos por la policía, sometidos a requisas y amenazas de retención de los vehículos.
Todo lo anterior, las declaraciones del ministro Molano y de la alcaldesa de Bogotá junto con los consejos de seguridad realizados en 11 ciudades del país dan un panorama de fuerte represión a las movilizaciones del 20 de julio. El ejército, la policía y el ESMAD no harán gala de sus uniformes y armamento, sino que saldrán una vez más a repetir la barbarie, asesinato, tortura, desaparición, violación y demás abusos cotidianos evidenciados en el marco del Paro Nacional.
De suma importancia también las sesiones ordinarias del Congreso en las que se elegirán de manera virtual los presidentes al Senado y la Cámara de Representantes. Se sabe desde ya serán elegidos para la presidencia de la Cámara de Representantes Jennifer Arias, y para el Senado Juan Diego Gómez, Arias pertenece al Centro Democrático partido de Álvaro Uribe y Gómez al partido conservador, ambos políticos tienen familiares involucrados en delitos de usurpación de tierras, narcotráfico y homicidio.
Entre el agite en las calles, los discursos presidenciales y las ceremonias a puerta cerrada de un ejército desprestigiado internacionalmente con las recientes noticias de la participación de militares mercenarios colombianos en el asesinato del presidente de Haití Jovenel Moïse se desarrollará el día de la “independencia” nacional. |