Se prevé que los primeros despidos se den entre personal de aeropuertos de Campeche, Ciudad del Carmen, Zihuatanejo y Mexicali. Los planes de la empresa tienen contemplado ofrecer a terceros sus operaciones de tierra en 36 bases de México. Solo Ciudad de México, Monterrey, Cancún y Tijuana estarán al margen de dicha operación.

Esto se da en el marco de modificaciones laborales implementadas por Aeroméxico en su reestructuración bajo el capítulo 11 de la Ley estadounidense, a su vez, en el contexto general del T-MEC. De hecho, para llevar a cabo esta iniciativa, la empresa a acudido a la Corte del Distrito Sur de Nueva York.

De esa forma Aeroméxico “renueva” sus Contratos Colectivos de Trabajo con los cuatro sindicatos en los que están adscritos la mayoría de sus trabajadores. A través de ello se busca el ahorro de 86 millones de dólares al año, según declaraciones de la compañía. Todo con el visto bueno de las burocracias sindicales.

Empresas como Mantenimiento para equipos de Aviación (MEA) y Swissport, se encuentran muy interesadas en aprovechar la tercerización de los servicios de tierra de Aeroméxico y sacar tajada de esta situación ventajosa, en detrimento del bienestar de trabajadores, pues la empresa ha ofrecido la recontratación pero bajo el esquema de subcontratación.

Con ello estamos viendo un avance en la precarización de las condiciones laborales de miles de trabajadores de esta aerolínea en medio de la tercera ola de la pandemia de Covid-19. Esto se debe a la voracidad de la patronal de Aeroméxico y a la nula voluntad de la burocracia sindical para defender los derechos de trabajadores.