Los partidos políticos encabezados por la Liga Nacional para la Democracia -cuya principal líder es Aung San Suu Kyi-, llamaron a rebelarse contra el ejército, dejando la resistencia armada solo en manos de los grupos guerrilleros. Dialogamos con Thang Deih Tuang periodista freelance y activista de Myanmar, quien nos informó de los principales hechos luego del llamado a la "guerra defensiva".
El último martes por sus redes sociales el Gobierno de Unidad Nacional (NR: NUG por sus siglas en inglés) a través del proclamado presidente "en las sombras" Duwa Lashi La llamó a que la población realice una “revuelta en cada esquina del país contra el mandato de los terroristas militares encabezados por Min Aung Hlaing” (N.R.: el general que encabeza la junta militar golpista), a la vez que planteó que la guerrillas y milicias de minorías étnicas a que lance ataques contra el Ejército (Tatmadaw).
BREAKING: Acting President Duwa Lashi La of #Myanmar’s @NUGMyanmar gov announces that from today Sep 7, 2021 the defensive war against the military junta has been launched — urges the citizens to revolt against the junta in every corner of the country. #WhatsHappeningInMyanmarpic.twitter.com/o42nYJvm5n
La Liga Nacional para la Democracia (LND) -ganadora de las últimas elecciones que los militares rechazaron dando un golpe de Estado-, junto a otros partidos menores y algunos líderes de guerrillas de minorías étnicas, conformaron este Gobierno civil "en las sombras". Esta suerte de "gobierno paralelo" se conformó en abril impulsado por LND para intentar negociar con los militares, mientras en las calles la población los enfrentaba resistiendo las brutales represiones, encarcelamientos y torturas.
Su líder Suu Kyi, actualmente con prisión domiciliaria -como otros representantes políticos- históricamente sostuvo esta línea de tratar de negociar y acordar con los golpistas. Incluso la hegemonía que su partido detenta en el NUG ocasionaba contradicciones al interior de este frente político, ya que las minoría étnicas recuerdan la persecución que sufrieron tanto por los gobiernos civiles como ahora con los militares. Aunque siempre la etnia más perseguida y obligada a desplazamientos forzosos fue la roghingya.
Tal es la saña que los militares tuvieron contra esta étnia -que incluyó masacres- mientras el partido de Suu Kyi (y ella misma) miraba para otro lado, que en estos meses en forma demagógica este Gobierno de Unidad planteó un repudio a esos crímenes y que los autores debían ser juzgados.
¿Qué está pasando en Myanmar?
El periodista Thang Deih Tuang nos decía: "el NUG le pide al pueblo que se provea de medicinas y comida y que evite viajar en estos días. Y a las "Fuerzas de Defensa del Pueblo (NR: PDF por sus siglas en inglés. Se trata de distintos focos de guerrillas que se unieron en estos meses a medida que la represión militar aumentaba) que organicen las operaciones militares necesarias. Inmediatamente después del anuncio se reportaron tiroteos en varias zonas del centro y sur del país".
En relación a la lucha por la independencia de algunas étnias en territorio de Myanmar, específicamente la del Estado de Kachín en el norte de Myanmar, Thang Deih aclaraba: "Hay un intenso conflicto entre la organización armada del estado de Kachín, al norte del país, con el gobierno militar. El ejército de independencia de Kachín es la organización étnica armada más poderosa del país."
El ejército del Estado de kachín es uno de los 20 grupos étnicos armados del país.
En cuanto a la situación de la población y en las ciudades nos decía que: "Actualmente las zonas urbanas son un caos, muchos negocios están cerrados y no sabemos lo que va a pasar mañana o esta noche. Teniendo en cuenta que los militares usan la estrategia de cortar recursos para controlar a sus enemigos, por ejemplo cortar la líneas de suministro de comida, ahora mismo no podemos comprar comida ni medicamentos, estamos esperando que de un momento a otro corten también internet y las líneas de comunicación".
Le consultamos sobre si hay combates en zonas urbanas y nos aclaraba que: "No hay combates en áreas urbanas, pero estallaron algunas explosiones en Yangon, la ciudad más grande de Myanmar, y en Mandalay la segunda ciudad más grande del país, la gente salió a las calles para protestar contra los militares".
Este llamamiento a la resistencia se da a dos semanas de que la ONU realice su Asamblea General, donde las potencias tendrán que definir quién ocupa el asiento correspondiente a Myanmar, si la junta militar que realizó el golpe -que ya aclaró que las elecciones se realizarán recién en el 2023- o este "Gobierno de Unidad Nacional".
Lo que parece ser una apuesta de la Liga Nacional para la Democracia y sus aliados de presionar al Tatmadaw para que negocie con ellos, evitando de esa manera que sean la clase trabajadora (que desde un principio se enfrentó al golpe) con sus propias acciones y el pueblo de conjunto, creando organismos de autodefensa, los que derroten a los militares golpistas.