Se trata de un proyecto presentado de manera independiente por el Movimiento Cromañón, en la figura de María Lujan Rossi (sobreviviente), que busca proteger a todas las obras artísticas reunidas alrededor del espacio conocido como el Santuario, así como a las intervenciones artísticas realizadas sobre la fachada del boliche donde ocurriera la masacre.
Esta nueva conquista de los Sobrevivientes, familiares y amigos de Cromañón se constituye no solo como un nuevo freno a los múltiples intentos de Rafael Levy de pisotear la memoria de los y las 194; sino también en otro paso firme en la pelea por lograr la expropiación y patrimonialización del boliche para crear un Espacio integral para la Memoria. Un lugar que, como expresa el proyecto de ley, refleje "no sólo lo que las y los pibes deseaban y soñaban sino que también exprese lo que sobrevivientes y familiares sienten, piensan y desean como recordación y como construcción de futuro." |