Faltando pocas semanas para el comprometido anuncio del nuevo gabinete, Gabriel Boric, junto a sus asesores cercanos, siguen teniendo intensas reuniones con representantes de todos los partidos del arco opositor para definir quienes participarán del gobierno a partir del 11 de marzo.
Si bien ya está claro que el Partido Socialista será una pieza clave en esta nueva articulación, la duda aún recae sobre el Partido por la Democracia (PPD), el Partido Radical y el Partido Liberal.
La cita entre el presidente electo y la presidenta del PPD Natalia Piergentili, abordó justamente el rol que tendrá ese partido en el próximo gobierno. Al término de la cita, Piergentili señaló que la reunión tuvo por objeto aclarar el rol del PPD con relación al gobierno y que estará al pendiente de si Boric solicita algún militante PPD para alguna cartera ministerial.
Cualquiera de las cartas que puedan presentar estos partidos deberán competir junto a las ya presentadas por los partidos y organizaciones políticas y sociales que componen Apruebo Dignidad.
Hasta ahora la línea del nuevo gobierno contendrá un fuerte componente de cooptación de los espacios sociales que lograron posicionarse en diferentes luchas durante los últimos 30 años. Por eso la posibilidad de que personalidades y referentes de luchas medioambientales, laborales, educación u otras, puedan llegar a algún cargo en el próximo gobierno tienen bastantes chances de ocurrir.
En esta línea Boric y su equipo jugarán todas sus cartas a tener un gobierno lo suficientemente amplio por arriba para paliar su debilidad parlamentaria, pero también por abajo, para asegurar una base social que le permita ganar legitimidad y ayudar a maniobrar las amplias expectativas que generó su victoria.
Moderar estas expectativas será, seguramente, una de las tareas más difíciles con las que tendrá que lidiar al comienzo del gobierno por lo que integrar a referentes legitimados en las luchas facilitará esa tarea.
Pero la revuelta del 2019 se mantiene en los ojos de muchos, y la posibilidad de una mezcla entre problemas económicos, bloqueo de la derecha y promesas inconclusas puede resultar fatal para Boric y el gobierno de Apruebo Dignidad. | 
