En un país donde el ambiente es noticia cada día, donde el gobierno nacional y los gobiernos provinciales promueven una falsa dicotomía entre ambientalismo y progreso, gran parte de la provincia de Córdoba enfrenta su enésima crisis hídrica con embalses en bajante y contaminados y con arroyos secos. Con el agua para consumo humano racionada o directamente faltante, mientras las temperaturas alcanzan los 40° C y muchas familias deben permanecer en aislamiento por el COVID-19.
En gran parte del corredor de las Sierras Chicas de Córdoba podríamos decir que hay una frase que marca el inicio del verano: “se rompió el acueducto”. Frase que señala el momento en que la falta de agua alcanzará un nuevo nivel crítico. Para otras zonas del corredor, que no son abastecidas por el agua de los embalses San Roque y La Quebrada, las excusas son similares: “se rompió un caño central”, “no llueve” o “el consumo es excesivo”. Cada tanto se reconoce el gran incremento poblacional de la zona, sin señalar que la planificación urbana que debió acompañar ese incremento ha sido nula. O mejor dicho, lo que debió ser una política pública fue dejado en manos de la especulación inmobiliaria.
Este jueves por la tarde, vecinos de Salsipuedes y otras localidades del corredor se convocaron en la rotonda de ingreso a la localidad para dar a conocer y protestar contra esta situación. Desde la Izquierda Diario dialogamos con Lucas Enrico, de la Asamblea por el Monte Salsipuedes.
“Estamos acá junto con el Asambleón de Sierras Chicas y junto a ciudadanos y ciudadanas de Salsipuedes y de las Sierras Chicas para reclamar por la falta de agua en el pueblo y en la región, un problema que si bien es histórico está agravado este año y se relaciona en parte con la falta de obras y de infraestructura adecuada en nuestro pueblo pero además con el gran crecimiento demográfico que tiene nuestra región en los últimos años y el avance de los emprendimientos inmobiliarios y en general de las construcciones sobre nuestro monte nativo.”
“Somos un grupo de asambleas que venimos trabajando en temas ambientales. Venimos trabajando en la asamblea por el agua de Salsipuedes, una asamblea ciudadana que congrega a diferentes agrupaciones ambientalistas, centros vecinales y ciudadanos de nuestro pueblo que están preocupados por esta situación. Venimos con este problema del agua, pero también con diferentes problemáticas ambientales. Nos hemos movilizado frente a los incendios, hemos trabajado coordinadamente con las brigadas forestales, como una forma más de apoyar desde la ciudadanía a estos grupos que luchan contra los incendios y protegen nuestros recursos naturales.”
“Creemos que estas cuestiones ambientales, el aumento de las canteras en la región y los desmontes están fuertemente relacionados con la pérdida de la capacidad de retención de agua en nuestras cuencas hídricas, de las cuales nos abastecemos. Denunciamos que también se está apostando constantemente a soluciones tecnocráticas al problema del agua, soluciones como el acueducto de Sierras Chicas Norte o el acueducto del Paraná que sabemos que va a ser un negociado para unos pocos y un endeudamiento para todo el pueblo de la provincia de Córdoba. Mientras que se podría solucionar con cuestiones muy básicas y sencillas como proteger a nuestro monte nativo. Nuestro reclamo está focalizado en eso en reclamar a las autoridades municipales, provinciales y también al poder judicial de la provincia de Córdoba que detengan los desmontes, que detengan la destrucción de nuestro ambiente porque de esa forma vamos a poder garantizar el agua para nosotros y para las generaciones futuras.” |