Esa experiencia común nos dejó muchas enseñanzas. Y una conclusión fundamental es que nada se consigue sin lucha, que tenemos que seguir organizados de manera asamblearia y democrática y por eso nos convocamos para poner en pie nuestra agrupación.
Cuando empezó la lucha de las tercerizadas ArgenCobra y EMA junto a un puñado de eléctricos socialistas del PTS, jóvenes de La RED y del CeProDH, compartimos esa experiencia con el gobierno peronista del Frente de Todos que permitió que nos despidieran en medio de la pandemia, desconociendo su propio DNU que lo prohibía. Tampoco obtuvimos ninguna respuesta positiva a nuestras demandas y así fue dejando claro que su prioridad no éramos los trabajadores y el pueblo. Alberto Fernández entre los bancos y los jubilados eligió a los bancos y entre los tercerizados y Edesur, eligió a los empresarios. Por eso nuestra agrupación es independiente de los partidos de los patrones y sus gobiernos.
Los dirigentes sindicales de Luz y Fuerza que logramos con la lucha que los convoquen a las audiencias del Ministerio de Trabajo, nunca reconocieron nuestra justa demanda de encuadramiento gremial y nos dieron la espalda durante todo el conflicto. Por eso vemos necesario recuperar los sindicatos para lxs trabajadorxs, apoyados en la organización democrática de las bases y derrotar a quienes protegen a los empresarios y funcionarios de los gobiernos. Unidos los trabajadores de planta y los tercerizados, tenemos que dar esta pelea.
Durante el conflicto de EMA (Te dejamos esta nota y esta) la empresa y los funcionarios del gobierno no pudieron derrotarnos durante esos largos 10 meses de lucha consecuente y tuvieron que hacernos grandes concesiones, aunque nosotros tampoco pudimos imponer nuestras demandas: la reincorporación de los despedidos, el pase a planta permanente y el encuadramiento gremial en Luz y Fuerza. Banderas que no bajamos y que conquistaremos con la lucha.
Nuestros verdaderos aliados fueron los partidos de izquierda. En el transcurso del conflicto se fueron sumando las organizaciones del FIT-U y el NMAS que acompañaban y le daban peso a nuestra lucha que se concentraba en apenas unas decenas de obreros persistentes.
Sabemos que los trabajadores tenemos que hacer política de nuestra clase, independiente de los patrones y confiando solo en nuestras propias fuerzas. Luchamos por la unidad de la clase trabajadora, por la recuperación de nuestros sindicatos de manos de los sindicalistas que apoyan a las patronales en vez de a los trabajadores, pusimos en pie la coordinadora de lucha del AMBA junto a los vecinos de Guernica, Los Ceibos y Castillo que luchan por la vivienda, junto a los ferroviarios tercerizados y despedidos y MCM, junto a los aeronáuticos de LATAM y GPS, y trabajadorxs de la salud, docentes y otros. En las elecciones también nos pronunciamos de forma unitaria apoyando la propuesta de la izquierda del FITU.
Somos la clase que mueve todos los resortes de la economía que produce todas las riquezas y garantiza todos los servicios, pero sin organización ese enorme peso social se pierde.
«Los trabajadores eléctricos nos organizamos
para pelear por un servicio de calidad en armonía con el medio ambiente,
pero también para recuperar las empresas y terminar con el modelo privatizador »
Para que vuelvan a manos de lxs trabajadorxs y usuarios populares. Para ese objetivo, buscamos la unidad de estables y precarios de toda la rama, como primer paso. Terminar con este modelo eléctrico que tiene como finalidad el enriquecimiento de unos pocos en detrimento de un servicio esencial y estratégico para el desarrollo de la sociedad moderna. Decimos basta de cortes sistemáticos de luz, boletas impagables, de la estafa laboral a los trabajadores que son precarizados vía tercerización sufriendo las peores condiciones laborales que se lleva la vida y la salud de nuestros compañeros. Sin reconocer el verdadero encuadramiento gremial para pagar menos salarios y menos cargas patronales.
Los planteles de Edesur y Edenor están diezmados incompletos y los trabajadores expuestos a permanentes extensiones de jornada, haciendo tareas con riesgo eléctrico con el consiguiente riesgo de vida; la empresa mientras era estatal contaba con (25.000 obreros) un trabajador cada 104 usuarios, hoy solo en Edenor hay una cuadrilla cada 4704 usuarios para una red que se triplicó. Las empresas privadas no invierten y nunca lo van hacer porque iría en contra de su sed insaciable de ganancias. Por eso hay que re-estatizarla bajo control de los trabajadores y usuarios. Sabemos que lxs trabajadorxs junto a los usuarios somos los únicos interesados por mejorar la catastrófica situación de la red eléctrica. Por eso creemos que con independencia política de los trabajadores de los patrones y sus representantes políticos, si nos organizamos podemos trazarnos un camino para instalar una alternativa a este modelo que viene fracasando durante más de 30 años.
Juntos a la izquierda del FITU marchamos en muchas oportunidades, este 8F con la bandera de EMA nos movilizamos junto al PTS contra el acuerdo con el FMI, porque no hay acuerdo posible cuando se trata de una deuda ilegal, ilegítima y fraudulenta, una estafa del gobierno anterior, que se va a pagar con más hambre para los trabajadores y el pueblo. Que, además aumentará la pobreza energética, la energía es un derecho no una mercancía, basta de lucro!
Nuestra primera tarea como agrupación es llevar una gran columna cuando en el Congreso se trate el acuerdo de coloniaje con el FMI que pretende subordinar la Argentina al gran capital internacional y nacional. Tenemos que movilizarnos y ganar las calles, la única manera de derrotar este acuerdo de re-colonización. Impulsando unidad de acción y exigiendo a todos los sindicatos que se pongan a la cabeza, llamen a una gran huelga nacional para derrotar el plan del Fondo Monetario.
El kirchnerismo a través de Máximo pretende lavarse la cara, como hace con las empresas eléctricas que durante la campaña eran críticos y hoy hablan de quitar la concesión a las empresas para entregársela a sus amigos como hicieron con Manzano y Vila en Edenor. La crítica al acuerdo está bien y nos da la razón a nuestro rechazo, pero si de verdad se van a oponer tienen que llamar a movilizar en las calles y que los sindicatos que dirigen llamen al paro y movilización. El Subte, Suteba, Telefónicos o Bancarios.
Invitamos a todos los trabajadores del sector a sumarse a esta agrupación para afrontar el desafío que expresamos en esta nota, en el camino de construir una herramienta de organización propia de los explotados y oprimidos para cambiar de raíz este sistema.
Te dejamos un teléfono de contacto
Ariel 116564-4416 |