Luego del desaire que acusarán por parte del nuevo gobierno al no ser invitados al cambio de mando, la CPC a través de su presidente Juan Sutil, se reunió con el equipo económico de Boric durante la semana recién pasada.
En dicha cita empresarios y gobierno buscaron trabajar sobre la agenda legislativa que se viene para el próximo periodo y donde Marcel y su equipo pusieron sobre la mesa las principales reformas que revisarán durante este semestre. Según Sutil, la reunión fue de trabajo(duró dos horas), donde temas tributarios y laborales marcaron la cita. Proyectos como salario mínimo, 40 horas y pensiones fueron parte de la conversación y serán parte del debate público las próximas semanas.
Este domingo, el presidente de la CPC señaló en el programa del Canal 13 “Mesa Central” que dicha reunión tuvo como objetivo transmitir las principales dudas que se expresan desde el mundo empresarial y que dicen relación con el aumento de la inseguridad en el país, por lo que habría reclamado mayor presencia policial en las rutas, tanto en el norte como en el centro y sur del país.
Sutil también señaló que el problema principal del debate no se debe centrar en la reforma tributaria, sino la creación de un pacto a largo plazo que les dé garantías de “confianza” y seguridad para invertir, es decir, en un pacto que les garantice sus millonarias ganancias y que no se toque la propiedad de sus inversiones, cuestión que el gobierno está lejos de pretender hacer de todas formas.
Además, y sin ninguna vergüenza, Sutil señaló que el real problema del país sería la baja productividad del trabajo, como si ellos no fueran los responsables de la I+D de las propias empresas, los sindicatos (no dijo nada en específico, quizás a riesgo de decir alguna atrocidad?) y el sueldo mínimo.
¿Y el clima para los negocios?
Según Sutil el problema a largo plazo que tienen los empresarios en el país es la Convención. Mientras la Convención se encuentre discutiendo una nueva constitución, las conversaciones que tengan con el gobierno u otros, pueden rápidamente llegar a un punto muerto debido a los cambios que se puedan producir en el marco jurídico actual.
De hecho, Sutil señaló de forma totalmente hipócrita que los empresarios quieren que Chile se vuelva un país desarrollado, pero para esto hace falta certeza jurídica y gobernabilidad (por ejemplo en el tema del control de la violencia), cuestiones que impiden que las inversiones apunten a ese objetivo.
También señaló que los empresarios estarían preocupados por las intenciones del gobierno de crear empresas estatales en rubros donde hoy no las hay. puntualizó rubros como la construcción, empresas inmobiliarias, farmacias y a reglón seguido señaló que esto no soluciona en nada los problemas de vivienda, salud y educación. Como si en Chile el negocio de la vivienda no fuera uno de los más lucrativos y ligados a la especulación privada en el valor de las viviendas, como si la falta de hospitales no se debería problemáticas como el negociado de las concesionarias que funcionó “tan bien” durante los últimos 30 años, ni que hablar de las farmacias y la colusión para mantener los valores inflados de los medicamentos, incluidos los esenciales para tratamiento de vida o muerte.
Sutil y los empresarios no quieren la creación de empresas estatales en rubros donde existe una concentración brutal de unos pocos grupos económicas que dictan las leyes del mercado que, supuestamente, se regula solo. Por eso señaló que la intromisión del Estado en estos sectores generaría una distorsión y que esto va en contra de lo que hacen los países desarrollados.
Consultado de forma insistente sobre su posición sobre la reforma tributaria, Sutil puntualizó que no se opone a una posible reforma tributaria, pero que si esta está pensada en el corto plazo, ello solo suma más incertidumbre, inestabilidad y desconfianza que si no se construye, perjudica al país. Una vez más se refieren a su bolsillo porque la mayoría de la clase trabajadora ya vive en la total incertidumbre de si su sueldo llega a fin de mes, de si podrá cubrir, un mes más, sus deudas ante el acoso de los bancos o la total desconfianza con las empresas que te amenazan con despedirte si te quejas o peleas total “hay una fila de personas que quieren tu trabajo”, esos son los parámetros que usan los empresarios para medir su intención de inversión.
Las ferias libres son la principal fuente de evasión tributaria
Cuando el periodista Iván Núñez le insistió con el tema de la carga tributaria, Sutil disparó contra la clase trabajadora que compra en las ferias libres: “en las ferias nadie da boleta” dijo el empresario, esta “cadena de informalidad” tiene una enorme repercusión en el fisco, considerando que el 70% del abastecimiento de los hogares proviene de las ferias. Esta aseveración hecha por Sutil parece olvidar los perdonazos a las grandes empresas que hizo el SII los últimos año,: solo por mencionar algunos: el 2018 se “perdonaron” más de 52 mil millones de pesos de los cuales 32.500 fue a grandes empresas que representaba al 3.8% del total de empresas que recibieron este “beneficio tributario”, o el “perdonazo” a Julio Ponce Lerou que rebajó su multa de los 66 millones de dólares (52800 millones de pesos) a sólo 3.3 millones (2.640 millones de pesos).
Sutil tiene el descaro de culpar la falta de recursos fiscales a que la clase trabajadora no paga IVA cuando acude a las ferias libres para poder acceder a productos económicos, porque el mismo kilo de tomates que se puede comprar a $800 pesos en la feria, cuesta sobre los $1500 en un supermercado.
No satisfecho con su intervención Sutil recalcó lo mucho que lo “ofende” frases como “no es sequía es saqueo” debido a que estas solo sirven para polarizar y no van al fondo del asunto, esto mientras las grandes empresas agrícolas aseguran sus cosechas y ventas al extranjero, sin importarles si las comunidades aledañas en Petorca o La Ligua tienen agua para abastecer el mínimo consumo humano, o si las escuelas de dichas comunas deben cancelar las clases debido a la falta de agua para los baños de los establecimientos.
Al igual que Luksic o el gerente de Gasco, el “poderoso” Sutil se lleva la mano al pecho para mostrar lo mucho que lo ofende que en el país se denuncie a su clase por el maltrato hacia los “débiles”, ya que los ricos también pagan impuestos, IVA, ¡incluso contribuciones!, cuestión que ya sabemos que no es así.
Los ricos y poderosos buscan todo tipo de triquiñuelas para evadir esos impuestos, así se denuncia año a año la apropiación ilegal de las riberas de los ríos, las casas “sin terminar” para no pagar, justamente! las contribuciones, los ductos ilegales para robar la poca agua que corre por los ríos y así llenar sus piscinas privadas o regar sus jardines mientras los niños pobres deben jugar en la tierra por falta de áreas verdes.
Además cabe recordar, que es precisamente sus ansias de expansión capitalista, que hoy lo tienen en conflicto con comunidades mapuche de Kurako, donde se reunieron para "discutir y analizar la eminente amenaza que significa el desarrollo del proyecto frutícola del nefasto empresario Juan Sutil en el fundo Nilpe, debido a intervención del rio Chol Chol, por medio de tres embalses que se pretenden instalar, de los cuales ya existe uno pese a no existir las autorización medio ambientales respectiva"
Finalmente sabemos, y la revuelta del 2019 lo puso sobre la mesa, que hay un importante cuestionamiento a quienes hipotecan el medio ambiente y la naturaleza en función de sus intereses, volviéndose además un referente de aquellos empresarios que hacen de sus declaraciones, un combustible que incendia la rabia de quienes viven a diario este sistema capitalista desigual y explotador. A empresarios de esta talla, no se puede enfrentar con tibiezas como pretende el gobierno de Boric, deberemos buscar salidas profundas que vayan a la raíz del problema, es decir, tocar los intereses de los grandes empresas, cuestión que hasta ahora, el gobierno solo quiere rozar. |