Este jueves 14 de abril, los portuarios salieron a la calle y se manifestaron exigiendo al gobierno Nacional que cumpla con dicho fallo, el cual les permite volver a sus puestos de trabajo y la vuelta de las operaciones en la terminal 5.
Este jueves 14 de abril, los trabajadores portuarios de la terminal 5 volvieron a las calles para exigir al gobierno Nacional, la vuelta de las operaciones después de un fallo favorable que no solo permite volver a sus puestos de trabajo, sino que también se suma a la extensión de la concesión hasta el 2024, siendo este parte de los reclamos llevados adelante por los mismos.
Esta extensión, hace que la terminal 5 del puerto de Buenos Aires, coincida con el fin de concesión de las terminales linderas: terminal 4 (APM) y TRP (Terminal Río de la Plata).
Luego de casi un año de conflicto con un bloqueo de 12 días, varias movilizaciones a la AGP (Administración General de Puertos), como también al ministerio de transporte a cargo de Alexis Guerrera, hicieron que haya mejores condiciones para la vuelta de más de 800 portuarios, evitando un tendal de tercerización de la mano del acuerdo 441/6 que condenaba a los trabajadores de la Terminal 5 a ser absorbidos por otras terminales con un contrato totalmente precario.
En un día de movilizaciones, la Plaza de Mayo se llenó de miles de trabajadoras y trabajadores desocupados que piden por trabajo genuino, mujeres de la villa 31 que exigen vivienda digna para que sus hijas e hijos tengan un techo, también trabajadoras y trabajadores de Aeroparque como GPS y Latam, el saludo de Raúl Godoy, obrero de Zanón, entre otros tantos sectores de trabajadoras y trabajadores que participaron. Los portuarios estuvieron en el ministerio de trabajo, a metros de la plaza para dejar un petitorio.
Tanto el reclamo por trabajo genuino de las y los desocupados, o el de vivienda, o como el de los ocupados también, se da en el marco de una agenda en la que el FMI y el gobierno Nacional ponen la prioridad en ajustar a millones de trabajadoras y trabajadores, empujando a más del 50% de la población a la pobreza y la indigencia.
“Es muy necesaria y urgente la unidad entre ocupados y desocupados, porque la deuda que quieren hacernos pagar viene con más hambre y mayores padecimientos para grandes sectores de la población y esto requiere la más amplia solidaridad entre quienes hoy, están siendo golpeados por esta enorme crisis de la que recién podemos ver solo el comienzo”, así lo manifestaron.