La mañana de este viernes, el presidente López Obrador se refirió al caso de Julian Assange. El creador de WikiLeaks habría filtrado, de la mano de la soldado Chelsea Manning, varios cables de información del ejército estadounidense, así como un video conocido como "daño colateral" en el que una cámara, montada en un helicóptero militar del ejército yankee durante una operación en la guerra de Irak, muestra el momento en el que un grupo de periodistas es acribillado por las balas de dicha aeronave al presumirse que son terroristas.

Por estas filtraciones es que los gobiernos aliados a Estados Unidos han venido persiguiendo al periodista. En años recientes, se había refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, pero gracias al gobierno neoliberal y de derecha de Lenín Moreno (apuntalado en su momento por el expresidente Rafael Correa), fue entregado a las autoridades inglesas. Recientemente un tribunal decretó su extradición hacia Estados Unidos.

Durante la mañanera, AMLO señaló que la mayoría de los medios están "calladitos" con respecto a la información sobre el estado de Assange. Al mismo tiempo, acusó a la Unión Europea con respecto a su doble moral: la institución imperialista no tiene reparo en señalar que el gobierno mexicano no se respeta la libertad de expresión y perseguir periodistas, "y en el caso de Assange no dicen nada", concluyó.

Pero ambas perspectivas no son mutuamente excluyentes. Efectivamente, en México se siguen asesinando periodistas y reporteros; en muchos casos, los indicios apuntan a sectores de la casta político-empresarial, como lo sugiere la muerte de Lourdes Maldonado, quien se había presentado a una de las mañaneras del presidente temiendo por su vida luego de haber llevado (y ganar) un caso legal de varios años contra la empresa PSN del empresario y exgobernador de Baja California, Jaime Bonilla.

Incluso si se llegara a dar el escenario de que el gobierno de AMLO le otorgue, como ocurrió en su momento con el expresidente boliviano Evo Morales, asilo político a Assange, nada garantiza que pueda volver a manos estadounidenses gracias a los grupos del crimen organizado. Estados Unidos tiene un largo historial del uso de la política anti-drogas para someter países de América Latina, como ocurrió con el escándalo Irán-Contras, en el que, por medio del tráfico de droga de Colombia, se financiaba a la guerrilla "Contra" de Nicaragua y se vendían armas al gobierno iraní. Nada descarta que el crimen organizado en México pueda jugar un papel similar.

PEMEX, Dos Bocas y el subsidio de Biden a la gasolina

Otro de los temas del presidente refirió a la industria de los hidrocarburos. Ante las críticas de la oposición de derecha, AMLO admitió que sí hubo sobrecosto en la construcción de la refinería de Dos Bocas, pero que éste estuvo dentro de lo que autorizó el Consejo de la paraestatal.

Es una exageración, les molesta mucho lo de Dos Bocas, hay un incremento, pero en los términos autorizados por el consejo de Pemex para la construcción. Lo que cuesta Dos Bocas es desde luego menor a lo que querían cobrar las empresas particulares.

La refinería se pretende inaugurar el próximo 2 de julio. “Vamos a producir el año próximo a toda la capacidad y vamos a lograr que no se compren gasolinas en el extranjero. Es una obra magna; ¿en dónde hacen eso? ¿En qué lugar del mundo?”, añadió.

Sobre ese mismo eje, felicitó al presidente estadounidense, Joe Biden, de poner en marcha un subsidio a las gasolinas. "Acaba de plantear el presidente Biden que va a otorgar un subsidio a las gasolinas en Estados Unidos. Ojalá y se lo aprueben, porque tiene que pasar todavía al Congreso y, con todo respeto, hasta los legisladores de su partido no le ayudan", dijo AMLO. En Estados Unidos, una de las formas en las que se expresa la inflación es a través del costo de la gasolina.

Una de las consecuencias de la guerra entre Rusia y Ucrania, además del aumento internacional de precios, es el incremento del precio de la gasolina. En Estados Unidos, esto afecta las cadenas de distribución, ya que las mercancías se transportan en su mayoría en camiones que dan abasto a los almacenes de comida y demás tiendas. Para frenar esta situación, Biden decretó que el gobierno subsidiará las gasolinas.

Esto también beneficia al grueso de la población, la cual en su mayoría acude a sus centros de trabajo en sus propios automóviles. La medida también puede beneficiar a México debido a la venta de gasolina que pueda derivar de la ya mencionada refinería en Dos Bocas.

Sin embargo, ambos son paliativos temporales que no solucionan de fondo las problemáticas de la población trabajadora. Por un lado, porque el petróleo es un recurso no-renovable, por lo que resulta inviable sostenerse de un bien de esas características para sostener la energía de los países. Por el otro, porque en tiempos de combate al cambio climático, se vuelve necesario buscar alternativas que no contribuyan a la contaminación y producción de gases de efecto invernadero.

Al mismo tiempo, mientras continúe el conflicto entre Ucrania y Rusia, las consecuencias de ello seguirán afectando la economía internacional. En última instancia, es la sed de ganancia y de búsqueda de recursos de las potencias imperialistas en países semicoloniales —ya sea la UE en Ucrania o Estados Unidos en México— la que genera la inflación, escasez, desempleo y crisis económica. Consecuencias de un sistema irracional que prioriza las ganancias y no las necesidades de la población.