El lunes pasado comenzó el juicio contra Ana en el Tribunal Oral Penal de Goya, provincia de Corrientes. La mujer está presa hace ocho meses, acusada de homicidio agravado por el vínculo y alevosía.
El 10 de noviembre tuvo un aborto involuntario en su casa, tras conocerse el hecho fue detenida y está en la Comisaría de la Mujer de Esquina. El viernes se espera el fallo.
Por esa razón Organizaciones de derechos humanos, mujeres, sociales, sindicales y políticas de Corrientes piden la absolución de Ana, denuncian que fue "víctima de una emergencia obstétrica en su domicilio".
En un documento afirman que la mujer “fue acusada mediante una caratula judicial que demuestra la ausencia de perspectiva de género y una visión más que perimida sobre el sojuzgamiento de la condición femenina”. Allí también cuestionaron que la provincia de Corrientes "no reglamentó la educación sexual para niños y jóvenes en las escuelas o instituciones sociales y tampoco adhirió a la ley nacional de interrupción voluntaria del embarazo (IVE)”.
La abogada feminista de Tucumán, Soledad Deza, dio su declaración el jueves en el juicio, y expresó que el fallo “deberá ser la absolución, porque se investiga un delito grave que no existe”. Deza fue la abogada de Belén, una joven que fue condenada a ocho años de prisión tras un aborto espontáneo y que tras una campaña nacional logró la absolución en 2017.
“Que el Poder Judicial utilice una figura como el homicidio, cuando está comprobado que fue un aborto, es muy preocupante” señaló a Télam sobre el caso Soledad Deza. A su vez agregó “hay una asimetría de poder muy fuerte, le pasa a muchas mujeres y esto expresa violencia institucional”. “Es un castigo que permanezca encarcelada preventivamente” sentenció. |