Hoy, la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad y el ministro de Trabajo encabezarán el lanzamiento de una campaña nacional de registro de trabajadoras de casas particulares. La nueva iniciativa tiene el mismo objetivo que el programa Registradas, de setiembre del 2021, de impulsar la formalización de las empleadas de casas particulares.
Los operativos serán en algunas localidades de la provincia de Buenos Aires y en el barrio de Retiro de la Ciudad de Buenos Aires. También estarán presentes en otras ciudades de todo el país.
Con un millón y medio de trabajadoras y trabajadores, el sector reviste un 70% de informalidad laboral, además de que los salarios están por debajo de la línea de pobreza.
El programa Registrar consistía en un beneficio otorgado por el Estado a las personas empleadoras, a quienes se les pagaba la mitad del salario de las trabajadoras de casas particulares contratadas, por 6 meses. Las condiciones para percibir el subsidio era que formalicen a las empleadas contratadas de manera irregular y que esa contratación dure, como mínimo, 4 meses más después de haber finalizado la percepción del estipendio del Estado.
Cuando lanzó el programa Registrar, el gobierno informó que un 70% del sector se encontraba en la informalidad. Un año después, se proponen hacer una campaña de concientización y fiscalización del trabajo no registrado en las casas particulares, aduciendo que un 70% sigue en esas condiciones.
Un verdadero fracaso del programa que nunca apuntó a mejorar los salarios y las condiciones de trabajo de las empleadas de casas particulares, sino beneficiar a sus empleadores. |