Una vez más la desidia patronal y la prioridades de los empresarios en terminar sus megaproyectos inmobiliarios, se cobra la vida de un trabajador.
Luciano Martinez, un joven trabajador de 27 años, oriundo de Ostende, Pinamar, descargaba un camión de aberturas a las 8:30 de la mañana, cuando se vinieron abajo varias estructuras encima de su cuerpo ocasionándole lesiones internas graves que minutos después llevarían a su muerte.
La ambulancia tardó 45 minutos porque, a pesar de la gran cantidad de trabajadores que realizan tareas de lunes a sábado, en el mega proyecto inmobiliario no existe una sala de emergencias médicas, ni médico, ni ambulancia.
En la causa tomó intervención la unidad funcional de Mar de Ajó N° 1 a cargo del Dr. Gustavo Mascioli.
El desarrollo inmobiliario de la Costa a costa de la vida de jóvenes trabajadores
No es un caso aislado, el desarrollo y las nuevas captaciones de inversiones inmobiliarias es un negocio redondo para los empresarios que invierten pero mantienen a miles de jóvenes en negro, de forma precaria, realizando obras en tiempo record.
Los sectores de empresarios inmobiliarios son acompañados por el actual intendente de Pinamar Martin Yeza. Por solo contar un caso, el mismo intendente inauguró la temporada pasada un Complejo de lujo llamado RENATA NORTE, donde meses antes un joven de 22 años de Villa Gesell había caído por una de las bocas del ascensor de la Torre C, de un segundo piso, ocasionándole la muerte instantánea.
Los mismos dueños declararon en una nota a Telpintv como se realizó la obra del complejo en pocos meses intentando complacer a sus clientes para que puedan disfrutar de sus departamentos en vacaciones de verano.