Con los votos de Juntos por el Cambio se aprobó el presupuesto presentado por el Jefe de Gobierno en una Legislatura vallada. Mientras los residentes y concurrentes terminan su octava de semana de lucha y se movilizaron junto a docentes.
Con los votos de Juntos por el Cambio se aprobó el presupuesto 2023 presentado por el Jefe de Gobierno en una Legislatura vallada, como ya es costumbre todos los años. Las vallas impedían que residentes y concurrentes de salud y docentes porteños puedan expresar su descontento con la votación que se realizaba dentro del recinto. La votación terminó 33 a favor, donde el larretismo tuvo que aceptar pequeñas modificaciones de sus compañeros de Republicanos Unidos y del bloque que responde a Bullrich para obtenerlos. Mientras que los 27 en contra fueron del Frente de Todos, Frente de Izquierda y Libertad Avanza.
Mientras la Ciudad cuenta con el conflicto más importante y grande de los trabajadores de la salud, en especial los residentes y concurrentes que llevan más de 8 semanas movilizados y con paro por tiempo indeterminado que ya lleva más de 15 días. Un conflicto con amplio apoyo popular mientras el gobierno porteño sigue sin dar una respuesta positiva.
Presupuesto: En el 2023 Larreta va a gastar $3.500 millones en publicidad. Eso equivale a 8.750.000 horas de trabajo de los residentes que cobran $400 la hora o 1.100.000 jornadas de 8 horas. Plata hay pero solo para la campaña presidencial de Larreta.
Así expresó Alejandrina Barry, diputada del Frente de Izquierda, a que le da prioridad el gobierno de la Ciudad: “En el 2023 Larreta va a gastar $3.500 millones en publicidad. Eso equivale a 8.750.000 horas de trabajo de los residentes que cobran $400 la hora o 1.100.000 jornadas de 8 horas. Plata hay, pero solo para la campaña presidencial de Larreta”.
Luego desarrolló los demás ítems del presupuesto “El Gobierno de la Ciudad tiene que dejar de vender tanto humo con mentiras sobre su supuesta excelente gestión. Acá lo que estamos viendo es cómo crece la recaudación en base a impuestos regresivos que es lo único que crece por inflación y hay recortes sobre las áreas sociales”, remarcó Alejandrina.
Acá se puede ver la intervención completa de Alejandrina Barry:
El debate transcurrió con chicanas entre Juntos por el Cambio y el Frente de Todos sobre quien tiene el presupuesto con mayor ajuste. Ambas fuerzas actúan y critican dependiendo de que lado de la Gral. Paz se encuentran, pero lo cierto es que el ajuste se da en todos los presupuestos, incluido el nacional que presentó Massa y votaron juntos bajo las metas de ajuste fiscal que pretende el FMI.
Así lo denunciaba Alejandrina Barry, dejando claro que desde el Frente de Izquierda se enfrenta todos los ajustes, gobierne quien gobierne, porque los que lo sufren son las mayorías populares: ”Acá podemos discutir mucho sobre la lucha de residentes y concurrentes, pero por qué tanto silencio sobre el ajuste a la salud publica a nivel nacional. Un recorte real de más del 30 % acumulado entre el 2021 y 2023. Le quitaron 35% y ahora te presentan como una conquista que recuperaron 5%”.
Y agregó la diputada del FIT “Esta es la razón por la que se unió el personal de salud de nación y provincia a la lucha de residentes de CABA. Marcharon residentes de 50 hospitales del Gran Buenos Aires el día martes”, trayendo a colación la enorme marcha del personal de salud que realizara esta semana, olvidada por conveniencia por varios y ocultada por los medios de comunicación masivos.
De la misma forma que realizó un recorrido por los demás ítems de las áreas sociales del presupuesto porteño lo realizó con el presupuesto nacional y Alejandrina dejó claro: “Nosotros nos vamos a oponer a este presupuesto de ajuste como lo hicimos en el Congreso. Porque nadie que se diga progresista, que defiende la salud pública, la educación y los derechos de los sectores populares, puede defender ni este presupuesto ni el presupuesto nacional del FMI”.
Al presupuesto se lo llama la “Ley de leyes” ya que es el que regula económicamente la orientación política de los gobiernos. Y como se demostró, en ambos lados de la Gral. Paz hablan de presupuestos equilibrados, sin déficit fiscal y con aumento de la recaudación, pero lo cierto es que se prioriza el pago de la deuda externa y para las mayorías hay ajuste.
Así lo entienden las y los trabajadores de la salud, en especial los residentes y concurrentes, que están transformando a la marea blanca en un tsunami por el salario y en defensa de la salud pública.
