“Las autoridades argentinas han llegado a un acuerdo a nivel de personal técnico sobre la tercera revisión bajo el acuerdo EFF de 30 meses de Argentina. El acuerdo está sujeto a la aprobación del Directorio Ejecutivo del FMI, que se espera se reúna este mes. Una vez completada la revisión, Argentina tendrá acceso a alrededor de US$6.000 millones (DEG 4.500 millones)”, sostuvo el comunicado del Fondo.
El pasado martes una delegación encabezada por el viceministro de Economía, Gabriel Rubinstein, desembarcó en Washington para reunirse con autoridades del FMI y cerrar las negociaciones para la aprobación de la tercera revisión del programa. Massa ya había realizado los deberes, con el Presupuesto 2023 diseñado para cumplir con las exigencias del Fondo. Completaron el equipo el jefe de asesores del Ministerio de Economía, Leonardo Madcur; el secretario de Finanzas, Eduardo Setti; el subsecretario de Presupuesto, Raúl Rigo y Marco Lavagna titular el Indec.
El staff del FMI estuvo encabezado por Luis Cubeddu, director adjunto del Departamento del Hemisferio Occidental; y Ashvin Ahuja, jefe de Misión para Argentina; quienes celebraron reuniones presenciales y virtuales con funcionarios argentinos para discutir políticas sobre la tercera revisión del acuerdo ampliado en el marco del Servicio Ampliado del Fondo (SAF).
Los técnicos del organismo que preside Kristalina Georgieva destacaron una vez más el rumbo ajustador que impulsa el Frente de Todos, así como las medidas adoptadas para fortalecer reservas y aumentar el endeudamiento externo. “La prudente gestión macroeconómica y los esfuerzos para movilizar financiamiento externo están respaldando la estabilidad macroeconómica—se está restableciendo el orden fiscal, moderando la inflación, mejorando la balanza comercial y fortaleciendo la cobertura de reservas”, se lee.
Esta semana debutó la segunda ronda de dólar soja que financia de manera diferenciada ($230) las liquidaciones de las patronales agrarias. Con el eje puesto en aumentar las reservas esta medida implica una ganancia extra para este sector que especuló con un tipo de cambio mayor. En plena crisis social el Gobierno del Frente de Todos le transfiere al campo más de $130.000 millones. También se confirmó el ingreso de un préstamo por US$500 millones del BID.
A pesar de las distintas expectativas que llevó la delegación argentina a las negociaciones –sobretasas y revisión de las metas respecto al aumento del costo de la energía por la guerra en Ucrania- el FMI volvió a sostener que “los objetivos del programa permanecen sin cambios durante el resto de 2022 y 2023.”
Más allá de este revés que no sorprende, Sergio Massa aseguró que van a “terminar el año cumpliendo el 2,5% proyectado al inicio de año en el proyecto de Presupuesto anterior". Ratificó el sendero de ajuste que pactó con el Fondo. De esta manera, con el visto bueno del directorio "llegarán a mediados de diciembre a la Argentina cerca de U$ 6.000 millones".
Seguir atados a las medidas de ajuste del FMI sigue profundizando el malestar que recae sobre trabajadores y sectores populares, con ingresos que cada vez compran menos. El programa con el FMI para pagar una deuda fraudulenta implica no combatir la inflación, reducir el crecimiento y mayores penurias a las mayorías. Romper ese acuerdo de entrega se vuelve impostergable.
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