Como escribe Ángel Arias, dirigente de la LTS, en un reciente artículo sobre las cifras de esta tragedia continuada: “Desde el último aumento de salario mínimo, a mitad de marzo de este año, hasta hoy, el salario ha perdido ya casi todo el valor, de por sí mísero, al que lo llevó ese aumento. 130 bolívares, que equivalían a unos 30 dólares al mes, hoy equivalen a 9 dólares mensuales al oficial (7 US$ al paralelo): es decir, el aumento de marzo, presentado por el Gobierno Nacional como su fuera una gran cosa, llevó el salario y las pensiones a 1 dólar por día, salario de pobreza extrema (según el Banco Mundial, organismo del capitalismo imperialista, menos de 1,90 dólares al día es un ingreso de pobreza extrema); y hoy está en 0,3 dólares diarios.” Es un furibundo ataque, donde no sólo por la inflación sino por la devaluación consciente de la moneda nacional, se dio continuidad a la mayor represión salarial.
Desde el gobierno de Maduro no les ha bastado con descargar la brutal crisis sobre los trabajadores y beneficiar a los grandes empresarios, capitalistas y transnacionales, sino que los condena a la esclavitud lisa y llana, y también aplicar el látigo antiobrero y las amenazas de cárcel si se rebelan. Pero la resistencia de los trabajadores y las trabajadoras estuvo presente en todo este año que termina.
Así lo reflejamos en La Izquierda Diario, cada lucha que se fue dando, tanto desde el sector público, las industrias del Estado y la empresa privada. Desde los empleados de la administración pública, del magisterio, educación superior, de la salud, de los petroleros, Sidor, planta Casima y demás industrias básicas, de los astilleros Dianca, de la industria del cemento, de los recolectores de residuos como Supra Caracas, de los trabajadores de la maderera Masisa, de la maderera del Orinoco, de la Coca Cola, de los del neumático como Pneus Venezuela, de Salva Foods, de Café Fama de América, de Farmatodo, del sector alimentación como Mondelez, Inlaca, Bimbo, industrias Diana, de la ex Kimberly Clark, de la industria del plástico como Alpla, trabajadores de las hidrológicas, de la Cantv, de los jubilados y pensionados, en fin, de muchas otras luchas. Por eso, para un repaso de todas estas peleas obreras del 2022, te invitamos a rever cada una de estas luchas:
Para el entrante 2023 a los trabajadores y las trabajadoras no les queda más que prepararse para seguir resistiendo a estos brutales ataques recurriendo a la movilización y lucha en las calles, así como en cada lugar de trabajo. Las masivas marchas y protestas que se llevaron a cabo en este 2022 a nivel nacional continúan marcando el camino para enfrentar todas las políticas antiobreras del gobierno de Maduro de la mano de los empresarios.
Desde la Liga de Trabajadores por el Socialismo (LTS), que impulsan La Izquierda Diario, se plantea que "En los combates venideros, es necesario tener conciencia que solo con la unidad en las calles y de forma independiente es que se pueden alcanzar los objetivos planteados hasta derrotar la política del gobierno y los patronales. Una lucha que debe entenderse más de conjunto en la que, además de incluir las demandas salariales elevar la pelea al nivel de la que nos declaran. Pero desgraciadamente las burocracias sindicales de todos los pelajes tienden a dividir las luchas, cuando por abajo lo que se ha venido expresando es la tendencia a la unidad."
Por ello, es que más que nunca se plantea la necesidad de coordinar todas las luchas que se desarrollan en el país y salir a luchar contra el fraude salarial del Gobierno de Maduro y por un salario igual a la canasta básica, indexado mensualmente a la inflación, lo que no es otra cosa que luchar por la escala móvil de salarios, así como también contra las nuevas tablas salariales impuestas desde arriba, luchando por derribar todas las leyes antiobreras del gobierno de Maduro.
"Los trabajadores y trabajadoras no podemos exigir menos que salarios y pensiones iguales a la canasta básica que se indexen mensualmente según la inflación, son dos demandas elementales para defender nuestros propios intereses, contra toda esa política burguesa que da prioridad a los negocios de los empresarios y de la casta gobernante por sobre nuestras vidas. ¡En este país hoy todo se indexa! Los créditos, los precios de las mercancías, las tarifas de los servicios, los alquileres, lo único que no se indexa son los salarios y las pensiones", se plantea desde la LTS.
Así para los impulsores de La Izquierda Diario: "Ante los paquetazos antiobreros del Gobierno de Maduro y los ataques del sector empresarial es necesario anteponer un plan obrero y popular de emergencia. Pero esto hay que realizarlo unificadamente golpeando con un solo puño hasta derrotar las políticas antiobreras de Maduro y los empresarios."
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