Este lunes salió a la venta la nueva camiseta Adidas – AFA de la selección, tras el campeonato mundial. A pesar de un reciente acuerdo con Massa, aumentará 6 mil pesos del modelo anterior. Las obreras y obreros que las fabrican no recibirán ningún aumento ni premio y ya les postergaron las vacaciones para febrero y marzo.
Todavía la Scaloneta no había llegado a Buenos Aires y todos sonreímos al ver como una máquina bordaba con hilos dorados las tres estrellas que estrenaba la selección de fútbol tras consagrarse campeón en Qatar.
Hacía algunas semanas se habían agotado las camisetas oficiales que vende Adidas en todo el país, a pesar de que costaba 17 mil pesos el modelo original y 29 mil pesos una edición especial. Hacía pocos días la empresa RA Intertrading, que tiene la licencia para fabricar las camisetas de Adidas en la Argentina, había firmado un convenio con Sergio Massa y otras empresas textiles para mantener sus precios congelados tras batir récords de remarcación.
Sin embargo, hoy cuando entramos a averiguar cómo se puede comprar la camiseta, nos enteramos que el nuevo modelo cuesta 23 mil pesos el modelo básico. En Europa ya se venden a 90 euros. El sitio está recibiendo miles de visitas por minuto, lo que promete un negocio fenomenal para Adidas, RA Intertrading y la AFA. Recordemos que para el Mundial de Qatar 2022 la venta de camisetas oficiales había generado a Adidas y Nike ingresos por más de 3000 millones de dólares y la de Messi había sido la más vendida del mundo. Aunque la mayoría nos conformamos con las imitaciones.
Pero quienes no podrán disfrutar del negocio, ni de ningún “premio mundialista”, son las obreras y obreros textiles que estos días calurosos están pasando sus horas en las plantas de Lugano (CABA) y San Fernando del Valle de Catamarca. Porque la imagen que circuló por las redes es solo una parte de la verdad. Si ampliamos el foco, esas máquinas rectas, overlocks y collaretas están manejadas por hombres y mujeres que conocen el oficio. Que cortan telas, aplican logos, controlan la calidad, cargan y descargan, hacen esas camisetas hermosas (y buzos, pantalones, remeras) que ya son noticias en los canales.
A pesar de los stocks agotados y las ganancias millonarias, nada cambió para quienes hacen las camisetas más famosas del mundo. Siguen ganando 313 pesos la hora y trabajando en las mismas condiciones que contamos acá. Según contaron este lunes a La Izquierda Diario, no recibieron ningún premio: ni trofeos, ni dinero, ni siquiera una camiseta de regalo. Peor aún, RA Intertrading les avisó que para cumplir con el “sueño mundialista” (y su negocio) tendrán que transpirar la camiseta un poco más. Y que las vacaciones que tenían planeadas para ir a visitar a sus familias tendrán que esperar.
En enero las máquinas y sus manos tendrán que correr como Enzo Fernández o Julián Álvarez, solo que por sueldos miserables. Algunos quizás puedan tenerlas en febrero pero a otros ya les avisaron que tendrán que esperar hasta marzo.
Podrían ponerle tres empanadas en vez de tres estrellas en el escudo. Uno se imagina entonces a cientos de costureras y maquinistas parados frente a la planta textil como Messi frente al banco holandés. O a la hinchada cantando "ya ganamos la tercera / y un aumento salariaaal".
En las redes seguimos compartiendo reels y fotos de los campeones, de pueblos festejando, de jugadas hermosas. Y está bien. Pero también vale la pena que el mundo se entere cómo trabajan quienes fabrican la ropa con los colores y números que hoy se hicieron famosos en todo el mundo. Para ellos Adidas no tiene premios ni descansos.
