Quitándose la careta. Así se manifiesta el establishment del imperialismo estadounidense en voz de la jefa del Comando Sur del Pentágono. Al preguntarse ¿por qué es importante América Latina?, la funcionaria no tuvo empacho en afirmar:
“¿Por qué es importante esta región? Con todos sus ricos recursos y elementos de tierras poco comunes, tienes el triángulo del litio, que hoy en día es necesario para la tecnología. El 60% del litio del mundo está en el triángulo de litio: Argentina, Bolivia, Chile… Tenemos 31 por ciento del agua dulce del mundo en esta región… Con ese inventario, a EEUU le queda mucho por hacer, esta región importa, ya que tiene mucho que ver con la seguridad nacional y tenemos que empezar nuestro juego… Tenemos también las reservas de petróleo más grandes, incluidas las de crudo ligero y dulce. Tienen los recursos de Venezuela también, con petróleo, cobre, oro, y está la importancia del Amazonas como los pulmones del mundo”.
No es la primera vez, ya el exconsejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton declaró hace unos meses que efectivamente su país había jugado un rol en el impulso de golpes de Estado en Latinoamérica.
No mucho tiempo antes, uno de los burgueses más mediáticos en este país Elon Musk, declaraba en Twitter que su país iba a dar golpes de Estado a quien ellos quisieran para obtener recursos como el litio.
Sin embargo, las declaraciones de Richardson, son explícitas en asumir como suyos los recursos de toda la región, pasando por el petróleo, el agua dulce o el litio.
Más aún, la militar asume como una disputa estratégica con China el dominio de la región y el control de los recursos de estos países.
¡Fuera yankees de América Latina!
Con estas declaraciones pareciera que el imperialismo estadounidense se muestra como lo que realmente es, un país que no lucha por la democracia y los derechos humanos, como hipócritamente se presenta muchas veces, sino un imperio en decadencia que busca someter a los pueblos para explotar sus recursos.
El agua, el litio, el oro, las selvas y los minerales, no son de las trasnacionales estadounidenses, pero tampoco de China ni de ningún otro país, estos recursos estratégicos, son de los pueblos y de los trabajadores latinoamericanos.
Es necesario que estos recursos, sean explotados de forma racional y sustentable de forma que le convenga a Bolivia, Perú, Argentina o México. Las selvas, las minas y los mantos acuíferos no son del imperialismo, son del pueblo.
A esta hipocresía y cinismo de los representantes del gobierno y de la clase dominante estadounidense, hay que oponerle la resistencia, la lucha y la organización de la mayoría trabajadora.
En Latinoamérica es necesario recuperar la soberanía, romper con el sometimiento y la expoliación, ya es momento de que los recursos de esta región se pongan en función del desarrollo de nuestros pueblos.
Para salir a luchar en contra de los gobiernos entreguistas y la voracidad del capital imperialistas las masas en Perú están mostrando el camino. La fuerza está en la clase trabajadora, en los campesinos e indígenas, hay que organizarla. | 
