Durante la jornada de este 3 de mayo se llevó a cabo el comienzo de los alegatos del juicio oral y público, que continuarán un día más. En los tribunales federales de Rosario, la familia de Franco casco, joven desaparecido, torturado y asesinado en el 2014, junto a organizaciones sociales acompañaron está instancia con un pedido claro: "Justicia, fue desaparición forzada, el Estado es responsable". La fiscalía sostuvo que a Franco la policía lo cazó, lo llevó ilegalmente a la comisaría 7ma, lo torturó hasta matarlo y desechó su cuerpo sin vida en el río Paraná.
Desde el 2014 su familia luchó incansablemente pidiendo justicia. Para muchos jóvenes de Rosario y para organismos de ddhh Franco Casco se convirtió en una bandera contra la impunidad y en defensa de los derechos de la juventud, en una ciudad que por años lideró el ranking de gatillo fácil, abusos policiales y detenciones ilegales. A mediados del 2021 comenzó el juicio donde se probaron los hechos. La fiscalía inició los alegatos a partir de dos preguntas centrales: ¿Qué fue lo que pasó? ¿Qué fue lo que hicieron? Y ¿Quiénes y cómo participaron? Seguidamente el fiscal federal Fernando Arrigo se explayó sobre el material probatorio que sustenta cada una de las afirmaciones de la fiscalía.
A Franco lo "cazaron" aproximadamente a las 23:30, sin documentar su ingreso en la comisaría en ese momento, lo que sumado a que la fiscalía no solía atender el teléfono de guardia durante la noche permitió un total dominio policial de la escena de los hechos. Franco sufrió una privación ilegítima de la libertad. Franco Casco fue llevado a la celda conocida como la "jaulita" dónde fue salvajemente torturado. Los jóvenes que estaban detenidos declararon que se escucharon gritos desgarradores de Franco en dos momentos durante dos horas y luego un silencio total. Tal como señalaron los peritos, Franco Casco murió por muerte violenta por asfixia como consecuencia de los tormentos sufridos dentro de la comisaría y con posterioridad fue arrojado sin vida al río Paraná, lugar donde fue hallado su cuerpo sin vida 24 días después. Lo que fue mencionado como mecanismo antiforense para borrar las huellas de la tortura.
Asimismo, la fiscalía estimó que les acusados fabricaron una coartada para garantizar su impunidad. Un montaje para intentar argumentar que Franco fue detenido el día 7 y liberado. A su vez, le negaron o brindaron información falsa a los familiares de Franco cuando fueron a la dependencia policial en búsqueda de su paradero. Por su parte, policías de Asuntos Internos omitieron informar los tormentos sufridos por Franco declarados por los jóvenes que estaban detenidos en la 7ma en el momento de los hechos.
Actualmente son 19 los imputados en la emblemática causa. Alvarez, Benítez, Blanco y Contino son quienes marcan como autores de desaparición forzada agravada por muerte de la víctima y torturas. Delito que según el art 142 ter del código penal conllevaría a condena de cadena perpetua. Gianola Rocha, César Daniel Acosta, Cintia Débora Greiner, Marcelo Alberto Guerrero, Guillermo Hernán Gysel, Rocío Guadalupe Hernández y Esteban Daniel Silva tambien se encuentran imputados por desaparición forzada de personas agravado por la muerte.
Romina Anahí Díaz, Belkis Elizabeth González, Ramón José Juárez, Rodolfo Jesús Murua, Walter Daniel Ortiz y Franco Luciano Zorzoli, se encuentran en la nómina de imputados con participación secundaria. Cómo así también Pablo Andrés Siscaro y Daniel Augusto Escobar que están bajo proceso por encubrimiento agravado. |
