El fenómeno “libertario”, con Javier Milei a la cabeza, emergió gracias y en gran medida a los miles de minutos de aire que cada medio de comunicación le dio. Él, junto a distintas figuras de la ultraderecha, emergieron como lo “nuevo” de la política. Entre ellos está Carlos Maslatón, que de nuevo no tiene nada. (Re)surgió junto con este fenómeno liberfacho y hoy se convirtió en panelista de C5N. Envalentonar a la ultraderecha para que le robe votos a la derecha, ¿ese es el plan?
La historia del “Puntero de Milei”
Aunque en varios tuits se lo vio apoyando la “gran gestión” de Sergio Massa (su excompañero de militancia), Maslatón hasta hace pocos meses apoyaba fervientemente y fue responsable de desarrollar a Milei como referente y a La Libertad Avanza como proyecto político. La experiencia viene de larga data, siendo que Carlos Maslatón comenzó su carrera política como joven de la UceDé , organización de la derecha liberal-conservadora tradicional creada por Alvaro Alzogaray. Maslatón fue uno de los armadores de la UPAU, el brazo juvenil del partido.
Esta organización terminó formando parte del gobierno peronista de Carlos Menem y Domingo Cavallo, quienes desarrollaron profunda y eficazmente el plan de la derecha argentina, servidora de las potencias imperialistas, en los fines de la década de los años 80 y gran parte de los 90.
Recordemos las palabras de Florencia Saintout en un acto en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP, en el que reconoció que quienes hoy eran parte de “La Cámpora” en su momento eran fervientes militantes del menemismo, como tantas otras organizaciones, y llamó a hacer un esfuerzo por no avergonzarse de su pasado, hoy a estos “exmenemistas” los vemos confluir en selfies, medidas y hasta programas político-económicos.
No hay que ir muy lejos para ver que a quien Cristina avala día a día en sus recetas económicas y puso al frente del ministerio de economía como superministro, Sergio Massa, en su juventud fue otro de los jóvenes que conformaron la derechista UCeDé.
Quienes transitaron la reaccionaria UCeDé al igual que Alsogaray, su fundador, integraron distintos gobiernos militares los cuales se impusieron con golpes de Estado y donde el terrorismo contra la clase trabajadora y juventud fue moneda corriente como lo vimos en la Revolución Libertadora.
Maslatón, además de ser el armador de Milei, inversor de Bitcoin y empresario mediático, fue uno de los referentes en contra de la cuarentena y de la cero intervención del Estado para desmantelar “lo público”, para que avance el sector privado y los mercados.
También y como el conjunto de los seguidores de Milei, esta en contra del derecho a decidir de las mujeres y disidencias sobre el embarazo y es un declarado militante autodenominado “provida”.
En el medio digital La Diaria, Maslatón declaró que si Milei ganara “va a necesitar desarmadores de funciones públicas… va a derogar entera la Secretaría de Comercio: eso no debe existir en nuestra visión. Ya habló del Ministerio de la Mujer, algo más simple de eliminar”.
Como vemos, un conservador con todas las letras, que más que guiños, merecen ser enfrentados en cada lugar de trabajo, en la universidad, como así también en los canales de televisión.
Con o contra los liberales
Como sintetizó Fernando Rosso en El Círculo Rojo después de la entrevista a Cristina: “En este momento de crisis, Cristina es capaz que terminar apoyando a un hombre (Sergio Massa) nacido en la UceDé, formado en el menemismo, que cogobernó con Macri durante gran parte de su gobierno y con María Eugenia Vidal durante toda su gestión, que es de confianza de la Embajada norteamericana, del FMI, íntimo de personas como Gerardo Morales en Jujuy (el carcelero de Milagro Sala) y amigo de lo peor del Poder Judicial o de los aparatos mediáticos. Es decir, un Menem del siglo XXI al servicio de un nuevo orden”.
Ya se alienta a viva voz la estrategia del kirchnerismo. Usar a los libertarios para que le rasguen más votos a Juntos por el Cambio que al Frente de Todos, polarizando con ellos en los actos oficiales como se la vio a Cristina en La Plata hace tres semanas, o abrazados en la TV, como lo vimos la noche de este jueves.
Más que nunca vale reafirmar que frente al humo liberfacho, y como vimos en Jujuy en la gran elección de Alejandro Vilca, la rebeldía puede y debe ser de izquierda, haciendo una gran elección del 16 % en toda la provincia y saliendo segundos en varias localidades, mientras los libertarianos llegaron a un magro 3 %.
La rebeldía no solo no es de derecha, sino que a este cuco que distintas fuerzas quieren promover, se lo debe enfrentar. Conocemos sus recetas de ajuste neoliberal, sus planes para “reducir el déficit fiscal” que no es más que reducir planes sociales, despedir a trabajadores del Estado y brindar magras jubilaciones que rozan la indigencia. Pongamos en pie una juventud que enfrente estas políticas reaccionarias, que luche para dar vuelta todo y no agache la cabeza frente al mal menor, que haga política de otra clase. |