En esta entrevista Carla nos cuenta su migración a Argentina, luego de que la dictadura de Fujimori, la represión, los despidos y las privatizaciones en su país, la dejaran sin oportunidades. "Uno se da cuenta de que el problema es internacional, vas a otro lugar y los patrones son los mismos y los trabajadores somos los mismos". Hoy se organiza en la Asamblea por Trabajo y es candidata por el FIT con Myriam Bregman.
“Migrar es difícil, cuesta salir a un lugar que no conoces, no sabes cómo te va a ir”, recuerda Carla al repasar su propia historia, para contarnos a nosotras que la escuchamos en el patio de su casa, una mañana fría de julio en Berisso.“Ciudad de migrantes” agrega ella, que sumó con la suya, una familia más a la lista de generaciones de trabajadoras y trabajadores que le dieron origen y aún hoy construyen esta ciudad bonaerense.
Carla Barroso nació en Perú en 1984, y en 2006 llegó a Argentina. Aquí conoció a su compañero, también peruano, con quien tuvo a su hija que hoy ya tiene 7 años. Juntos se instalaron en el barrio berisense de Santa Cruz.
Actualmente se organiza junto a compañeras y compañeros que luchan por trabajo genuino en la Asamblea Permanente por Trabajo y desde hace poco es precandidata a concejal en las próximas elecciones con Federico Surila, en la lista que encabezan Myriam Bregman y Nicolás del Caño.
Con ella conversamos en esta entrevista sobre su vida, que es como la de la mayoría de las mujeres trabajadoras en el mundo, y única a la vez. Su experiencia, sus conclusiones, entre mate y mate en el patio de su casa, se entrelazan con risas, emoción y anécdotas.
Allí nos cuenta que en la Asamblea“la mayoría somos mujeres y trabajamos en las famosas changuitas como las conocen acá, que es trabajo en negro, informales, sin derecho a seguro social, que pasan los años que no puedes juntar para una jubilación, que no te podés enfermar, porque si ese día no trabajo, ¿cómo mantengo a mi familia?”,.
Ella además es organizadora de la resistencia en Argentina al gobierno golpista de Dina Boluarte en Perú; esa mujer que asumió la presidencia en diciembre pasado, luego de derrocar al electo Pedro Castillo -y que desató oleadas de protestas populares en todo el país y una furiosa represión- generó entre quienes estaban del otro lado de la frontera la creación del espacio Peruanos Autoconvocados que “surgió de la comunidad misma”, “por toda la indignación e impotencia que sentíamos desde aquí, desde lejos”.
“Aquí en Argentina también, con esos mismos métodos y esa misma justificación se agarran con el racismo, igual como Dina Boluarte”, reflexiona: “Empezaron a llamar que son terroristas los que están haciendo todo ese quilombo, esa protesta, que no son peruanos son otros. Acá en Jujuy pasa lo mismo, también empiezan a decir que no son argentinos, que son del otro lado”. Así “uno se da cuenta que el problema es internacional, vas a otro lugar y los patrones siempre son los mismos y trabajadores somos los mismos”.
Carla aceptó la propuesta de precandidatura, como desafío y con entusiasmo,“con ganas de seguir organizándonos, unir nuestras luchas con las demás mujeres, migrantes, trabajadoras”. Y como quien encuentra una síntesis perfecta en las palabras de otro trabajador y diputado por el FIT, recuerda:“me gustó lo que dijo Alejandro Vilca -cuando se debatía a reforma constitucional en Jujuy- que dijo ´¿Dónde podría estar yo que soy un obrero de la recolección de residuos si no es en las calles luchando con todos mis compañeros trabajadores?´. Y se fue a marchar. Eso significa mucho.”
