Cerca de las 18 hs de este martes en el estadio de Arsenal, comenzó el acto de cierre de campaña de la Provincia de Buenos Aires de Unión por la Patria (UP).
Con Massa y Kicillof como únicos oradores, el peronismo reunió también en las primeras filas a intendentes, funcionarios, legisladores y dirigentes sindicales. Con la ausencia de Cristina Fernández, estuvo presente frente al escenario Máximo Kirchner. A su lado se la vio a Cecilia Moreau, del Frente Renovador y presidenta de Diputados. Una ausencia esperada pero notoria fue la de Martín Insaurralde, intendente en licencia de Lomas de Zamora y protagonista del escándalo del yate en Marbella.
En un marco adverso para el peronismo de cara a las elecciones generales, tras cuatro años de gobierno en los que la situación de las mayorías no hizo más que degradarse y la crisis profundizarse, los oradores del acto se centraron en hacer promesas alrededor de un supuesto "desarrollo", del trabajo y de la educación.
Eligieron a la vez polarizar con los planteos y programa de la extrema derecha de Milei. La misma fuerza política que desde el propio oficialismo se levantó con el objetivo de restarle votos a Juntos por el Cambio, y que el propio Frente Renovador de Massa colaboró para armar las listas de los "libertarios" en diversos distritos del país. Un secreto a voces, admitido públicamente por Sergio Berni y Juan Grabois.
Se trata también del mismo espacio al que Massa durante el acto y en oportunidades pasadas llamó a construir un Gobierno de "Unidad Nacional" para el mandato que viene. Una unidad que sólo puede traer un ajuste recargado para las mayorías. "Vamos a llamar a la Unidad Nacional para que convirtamos en política de Estado aquellas políticas que nos enorgullecen", arengó Massa en Sarandí.
Esa propuesta a los sectores del PRO, la UCR y los libertarios fue suscripta también por Axel Kicillof en el acto, quien recordó que había sido ya hecha a su vez por la vice presidenta: "Ya lo había dicho Cristina, apoyamos el planteo de Unidad Nacional, necesitamos grandes acuerdos para lo que viene."
Los candidatos hablaron de educación, trabajo y salud, pero esas áreas no paran de sufrir los ajustes de los distintos gobiernos y ser el blanco de los planes del FMI. Kicillof hizo algo más de hincapié en la fecha del 17 de octubre y lanzó un curioso paralelismo: "El 17 de octubre se trataba de meter las patas en la fuente, hoy se trata de meter los votos (de Massa) en las urnas".
En un momento de su discurso, Kicillof enumeró algunas de las conquistas obreras obtenidas durante los ’40 y ’50, tales como el aguinaldo y las vacaciones pagas. El gobernador presentó la historia solo como “derechos otorgados” por Perón. Sin embargo, esa parte de la historia fue mucho más compleja. Esas conquistas fueron resultado de importantes luchas de la clase trabajadora, que se habían iniciado en los años previos y que el peronismo pudo otorgar en el marco de una situación económica excepcional.
El cierre a cargo de Massa incluyó un ataque político a las y los docentes que le ponen el cuerpo y defienden la educación pública, tal como lo hizo en otras oportunidades: "Tenemos que comprometernos con mejor salario docente y presentismo para que pibes y docentes estén adentro del aula". Atando el "mejor salario" para los docentes al "presentismo", Massa volvió a tirarse en contra del derecho a la protesta y el paro.
Tras referirse, entre otros temas, a los principales recursos naturales que posee el país, como el litio, el gas no convencional y el petróleo, los cuales considera desde una perspectiva extractivista y de entrega a las grandes multinacionales saqueadoras, abordó el tema de la llamada "inseguridad".
"Acá en la Provincia tenemos una obligación y compromiso de ley con nuestros vecinos... Axel, quiero que cuentes conmigo: la lucha contra la inseguridad va a ser algo personal", señaló el candidato de UP para referirse al pequeño delito. Ahí mismo lo metió en la misma bolsa con el crimen organizado, como el narcotráfico y la trata, que cuentan con la complicidad política y judicial.
Cerró su discurso con la mencionada Unidad Nacional, reforzando la idea con el 17 de octubre y la conocida frase de Perón de "para un argentino no hay mejor que otro argentino". La cual ciertamente da pie a alguna eventual propuesta de unidad con otras fuerzas, mas allá de qué sector se trate o cuán reaccionario éste sea.
De esa manera concluyó el primero de los tres cierres de campaña que tiene planificado UP. Tras el realizado en el distrito electoral más populoso, le sigue este miércoles uno en la Ciudad de Buenos Aires y por último, el cierre nacional en alguna fábrica, también, de la Provincia de Buenos Aires.
A pesar de Massa, Kicillof y los referentes de UP centrar sus planteos polarizando con las otras dos coaliciones, las tres fuerzas coinciden en continuar y profundizar el ajuste que ordena el FMI para pagar la deuda ilegal tomada por Macri y legitimada por el Gobierno del Frente de Todos. Es decir una continuidad de la pobreza, los bajos ingresos y la inflación sin control.
Por el contrario el Frente de Izquierda Unidad, con Myriam Bregman y Nicolás del Caño, representa una alternativa al ajuste y la pobreza. Es una vía para quienes no quieren resignarse ni seguir sometidos al FMI. Se trata de una opción para quienes rechazan y enfrentan el saqueo extractivista, para quienes defienden los derechos de las mujeres, de las y los trabajadores. |