El Insituto Nacional de Estadísticas y Cesos (Indec) confirmó este miércoles que la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y la Canasta Básica Total (CBT) tuvieron en septiembre una suba de 13,2 % y 12,2%, respectivmente.
A pocos días de las elecciones, los datos oficiales muestran que en los últimos doce meses la canasta familiar que mide la pobreza (CBT) aumentó un 149,1%, mientras la que mide la indigencia (CBA) lo hizo en un 160,7%. En ambos casos superando la inflación que fue de 138,3 % interanual en septiembre. Las variaciones de la CBT y la CBA acumulan en el año incrementos de 109,4% y 120,1%, respectivamente.
El Indec confirmó que en el mes de septiembre una familia de 4 integrantes (dos adultos y dos menores) necesitó percibir ingresos por encima de los $ 319.422 para no ser considerado pobre. La línea de la indigencia para el mismo grupo familiar fue de $ 147.881, una cifra superior al Salario Mínimo, Vital y Móvil que en septiembre asciende a $118 mil.
Las canastas no incluyen gastos importantes de las familias trabajadoras como el pago del alquiler. En este sentido, la Canasta de Consumos Mínimos que elaboran los trabajadores de la Junta Interna de ATE-Indec indica que "un Hogar constituido por una pareja de 35 años con dos hijxs en edad escolar necesitó, en agosto de 2023, $436 mil para satisfacer sus necesidades.”
Bajo la bota del FMI, aumenta la pobreza y el malestar social que afecta a las mayorías. Otro “logro” del gobierno, Milei y Bullrich piensan seguir el mismo rumbo de ajuste social.
Los datos oficiales se dan a conocer a pocos días de las generales y en el medio de corridas cambiarias y de creciente especulación. Las medidas de Massa, como la devaluación pos PASO, dispararon la inflación, empobreciendo más al pueblo trabajador. Ante la catástrofe que amenaza, es necesario luchar urgentemente por otra salida. La defensa del salario es de primer orden. Se necesitan medidas de emergencia como un aumento para recuperar lo perdido para jubilados, ocupados y programas sociales.
El Frente de Izquierda Unidad plantea una serie de medidas para que no sean una vez más los trabajadores y el pueblo los que paguen los costos de esta crisis. Empezando por el desconocimiento soberano de la deuda y la ruptura con el FMI.
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