Alrededor de 300 personas, en su mayoría mujeres y diversidades se dieron cita en una convocatoria que, como a nivel nacional, se toma como una primera demostración de fuerzas frente a la transición de este gobierno y el próximo de Milei.
Con la consigna de cabecera Ni Violencia Ni sometimiento, Unión Organización y Fuerza, diversas organizaciones feministas como El Agite, Rosita Salvaje, Pan y Rosas, Isadora, del colectivo LGTBIQ, la CODEMU, organizaciones sociales y barriales, la Wallmapu Rebelde, algunas pecheras de CTA y CCC y la izquierda ganaron las calles de Viedma. Con el sentido reclamo de "Donde esta Tehuel", la defensa de las mujeres originarias, de los territorios y el agua la marcha pasó por la Legislatura provincial, institución que acaba de aprobar medidas en favor del extractivismo y contra las comunidades.
La participación mayoritaria del activismo de la comarca impuso su impronta, pasando por la Catedral para expresarse contra el poder eclesiastico y la reivindicación mileista de la dictadura.
Finalmente se marcho por la costanera, donde se cerró con una jornada cultural. Fue notoria la ausencia de organizaciones estudiantiles y politicas del peronismo.
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