Despidos, tarifazos en servicios públicos, devaluación y más aumentos de precios, fueron las promesas de Luis Caputo, actual ministro de Economía de Javier Milei (y exministro de Mauricio Macri).
Para la casta reciclada, no hay problema si el ajuste lo paga el pueblo trabajador; mientras los grandes bancos, empresarios y exportadores la sigan levantando el pala.
"No hay plata", dicen, luego de que el financiamiento al dólar soja y los intereses pagados a bancos, secaron las reservas. Y frente a que el gran empresariado, nacional y extranjero, se lleva 5 puntos del PBI por no pagar impuestos.
Ellos tienen clarísimo que las medidas económicas que proponen son para afectar al pueblo trabajador, a los jubilados, profesionales y pequeños comerciantes. Ni siquiera va a pagar la casta política: si no las mayorías laburantes.
Así lo dejó ver María Eugenia Talerico, quien fue funcionaria del gobierno de Macri y apoyó a La Libertad Avanza en el balotaje de este año.
Ante las medidas que anunció Caputo, se burló en la red social X.
"Agarremos las bicicletas" -pues los aumentos en transporte y combustible serán impagables.
"Ahorremos energía" -pues la boleta de servicios públicos serán impagables.
"A compartir el alquiler" -pues se agravará el problema del acceso a la vivienda.
"Pan y vino y que Dios cuide nuestra salud" -remató. Le faltó decir: "si no tienen pan, que coman torta", frase que se le atribuye a María Antonieta, antes de que la revolución francesa le cortara la cabeza por tirana.
María Eugenia Talerico (quien había sido anunciada como posible directora nacional de Migraciones) luego tuvo que pedir disculpas por su posteo en twitter.
"Lamento si el tono jocoso de mi tweet afectó a muchos ciudadanos que están pasando momentos muy críticos (...) La idea que se me cruzó al escuchar las medidas que anunció el gobierno, fueron ejemplos de países donde no se alienta la costumbre del despilfarro y el consumo desmedido de sus sociedades", publicó.
Mejor no aclarar que oscurece. Tanto Talerico, como Javier Milei y los demás funcionarios del actual gobierno, tienen condiciones de vida muy alejadas a las de las mayorías populares.
Mientras es una realidad para millones de personas, el tener que compartir vivienda no por elección, si no por necesidad; los miembros de la casta política de Milei, no conocen estas penurias y carencias. Por eso se burlan de ellas y luego tienen que pedir disculpas. |