Las imágenes llegan a través de las redes sociales y son difundidas por medios alternativos. Las fuerzas federales que comanda la exministra de De la Rúa paran colectivos en calles y avenidas del AMBA en busca de “manifestantes”. Sin delito alguno cometido por los pasajeros, hicieron bajar a decenas de personas y no las dejaron seguir circulando, como garantiza la Constitución. Así decidieron recordar Bullrich y compañía el 19 y 20 de diciembre de 2001.
Desde la mañana de este miércoles el “Comando Unificado” organizado por el Ministerio de Seguridad a cargo de Patricia Bullrich realizó operativos de control represivo, parando y revisando colectivos y otros vehículos en avenidas y calles del AMBA. La intención, según la propia versión oficial, era anticiparse a que miles de manifestantes lleguen a la Ciudad de Buenos Aires con intención de sumarse a la movilización convocada para la tarde desde Congreso a Plaza de Mayo.
Como muestran estos videos (distribuidos por usuarios a través de redes sociales y grupos de Whatsapp), el apresto represivo tiene características asemejables a un “estado de sitio”, que es cuando el Estado cercena las libertades democráticas con el argumento de que hay una conmoción interior u otro tipo de amenaza a la estabilidad institucional. Aunque nada de eso significa la movilización convocada para este miércoles por más de cien organizaciones políticas, sociales, gremiales, estudiantiles, originarias y ambientales; el gobierno de La Libertad Avanza intenta instalar un discurso hipercriminalizador y temerario a fin de desalentar la movilización popular.
AHORA: En la Au Ricchieri, la policía controla y sube a colectivos para revisar si los pasajeros llevan banderas o pruebas de dirigirse a una manifestación pic.twitter.com/v3XexMRu2N
Tanta amenaza represiva habla de las propias debilidades del gobierno nacional y de lo inevitable que será la movilización popular ante el plan de guerra económico del oficialismo contra las condiciones de vida de las mayorías sociales.
Entre los primeros efectos del megaoperativo represivo está el ataque a la libertad de transportarse de miles de personas a sus lugares de trabajo o estudio. Cuando en pleno viaje por una avenida la Policía, sin que se esté cometiendo ningún delito, frena un colectivo, sube a su interior, filma a los pasajeros y hasta los hace bajar por ser “sospechosos de manifestarse”, está atacando un derecho humano elemental. Eso es lo que hace Bullrich y sus uniformados. Y si bien las imágenes más elocuentes son registradas por pasajeros y no por las grandes empresas periodísticas, éstas reproducen los discursos oficiales y muestran en sí mismas de qué se trata la cosa.
Por caso, a las 10:25 de la mañana TN informó que “en la panamericana, altura Pilar, detuvieron a un micro que lleva a treinta pasajeros posibles manifestantes. Los hicieron bajar, están volviendo ya a sus casas caminando y el micro siguió su camino vacío. Ya se van dando algunos resultados en este sentido”.
¿Qué es esto? ¿Bajar a la gente de los colectivos como si fueran sospechosos de qué? Hoy la movilización es en hecho en defensa de las LIBERTADES DEMOCRÁTICAS. Tenemos que ir todos y todas para dejar en claro que no vamos a dejar que instalen una pseudodictadura. Obelisco 16.30 pic.twitter.com/8RuvQfzscC
“Posibles manifestantes” que son bajados del bondi y mandados a sus casas. ¿Y la libertad, carajo?No hay que permitir estos atropellos, que son el preámbulo de una represión a la que el Gobierno quiere llegar. Semejante avanzada sólo podrá ser frenada y vencida si decenas de miles nos movilizamos para defender los derechos, empezando por el más elemental de todos: el de manifestarse y protestar.