Federico Sturzenegger afirmó este viernes por la tarde que la semana que viene el oficialismo de la Libertad Avanza enviará al Congreso un nuevo proyecto para eliminar 160 leyes. La medida se suma a la presentación de las "Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos" -conocida como Ley Ómnibus- presentado esta semana por la gestión de Javier Milei y al DNU para desregular la economía.
“El proyecto de reformas tiene una dimensionalidad que es más profunda que las reformas mismas; es como una reconfiguración de la estructura del poder económico en Argentina”, afirmó el asesor presidencial que, sin embargo, todavía no tiene cargo oficial. Cabe señalar que ambas cámaras legislativas se encontrarán en período de sesiones extraordinarias, donde deben tratar la constitucionalidad de las 89 páginas del DNU y 664 artículos de la Ley Ómnibus.
“La única manera de lograr el cambio es básicamente desarmando esa estructura y para desarmar esa estructura tenés que drenarlo de sus recursos, porque esos recursos son lo que usan para sostener el statu quo", dijo el ex presidente del Banco Central y arquitecto de las reformas de LLA. Y agregó también que las medidas representan solo una porción de los cambios que el presidente quiere lograr. “No me acuerdo de nadie que tuviera tanta contundencia”, expresó.
Lo llamativo es que Sturzenegger no caiga en la cuenta de que nadie tampoco logró generar tanta bronca y descontento en tan poco tiempo en la historia reciente del país. En tan solo 19 días de gestión, las medidas anunciadas por Javier Milei y La Libertad Avanza provocaron la movilización de miles a Plaza de Mayo en lo que fue la Marcha del 20 de diciembre; cacerolazos espontáneos en AMBA y las principales ciudades del país; una concentración en Tribunales de la CGT y el anuncio de un paro general con movilización, entre otras.
Además, un estudio publicado esta tarde por la consultora Zuban Córdoba y Asociados indicó que Milei perdió más de un punto de imagen positiva por día, tratándose de la pérdida de diferencial positivo más acelerada de la que ese estudio tenga registro incluso a nivel regional.
Estos son apenas las primeras reacciones al ajuste de shock que ya empezó a aplicar el gobierno, con la devaluación del 100% y recortes al gasto público, la entrada en vigencia del DNU de ajuste de Milei que deberá tratarse en el Congreso Nacional en los próximos días, la aplicación del protocolo antipiquetes de Bullrich, aumentos en transporte, la derogación de la Ley de Alquileres y la amenaza a los derechos adquiridos por los trabajadores y sectores populares a lo largo de la historia.
De cara al paro general del 24 de enero al que la burocracia sindical convocó luego de las importantes movilizaciones como el 20D y los cacerolazos masivos, como los que se vieron en Congreso, es fundamental redoblar la apuesta de la movilización y la organización de los distintos sectores de la clase obrera para responder a la altura del ataque que preparan Sturzenegger, Milei y cía para formatear al país según los intereses de las grandes patronales como Techint; el FMI y el capital financiero internacional en interés de sus propias ganancias, hundiendo al conjunto de las mayorías populares en la miseria.
Como plantean el sindicalismo combativo y la izquierda, unir a los distintos sectores de trabajadores (en blanco, informales, desocupados) es una tarea urgente para conquistar la fuerza para derribar su plan de ajuste y formatear al país pero sobre las bases de nuestros intereses, los de los sectores populares, desde abajo y para que la crisis la paguen los capitalistas.
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