Fotografía: Vierja -ph
Al conocerse la ley ómnibus y su planteo de desmantelar las áreas públicas de la cultura para entregarlas a las "leyes del mercado”, las y los trabajadores de la cultura, junto con artistas y estudiantes se empezaron a organizar: Abajo el DNU y la ley ómnibus.
El ataque a la cultura plantea derogar la Ley Nacional del Teatro (24800), que tiene como objetivo la creación del Instituto Nacional del Teatro, junto a la Ley de No Demoliciones de Salas (14.800). Dicha ley es de 1997, se plantea federal y como "promoción y apoyo del Estado Nacional". El Instituto Nacional del Teatro (INT), es la institución que organiza concursos, muestras, festivales, otorga subsidios y becas; siendo un apoyo al circuito del teatro independiente que es muy prolifero en el país.
“El teatro es trabajo y, como tal, generador de miles de fuentes de empleo. Con la derogación de la Ley Nacional del Teatro no solo están en riesgo los puestos de quienes formamos parte del Instituto Nacional del Teatro, sino de todas aquellas fuentes laborales que dependen de la puesta en escena de obras y ciclos de teatro independiente: rubros técnicos, actorales, dramatúrgicos y de dirección, salas y espacios de todo el país, medios especializados e infinidad de actividades conexas a la producción de las artes escénicas.”, dice la comunicación oficial del Instituto Nacional del Teatro.
El pasado 30 de diciembre, se organizó una masiva movilización al Fondo Nacional de las Artes y al INT, repudiando el ajuste en la cultura. Siguieron proliferando las acciones a lo largo y ancho del país.
|